Los maestros de escuelas públicas se hicieron presentes en la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL) 2018, no solo como visitantes, sino como autores y expositores.
A través del Fondo Editorial del Magisterio (FEM), los docentes de México han encontrado un espacio para compartir su experiencia por medio de la escritura. En esta ocasión, llevan a la FIL 334 obras, 70 de ellas inéditas.
En 2013, cuando el maestro Juan Díaz de la Torre asumió el cargo de presidente del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), creó un proyecto editorial que hoy está consolidado como el FEM.
“Este es el sexto año en el que participamos en la FIL de Guadalajara”, explica la coordinadora del SNTE en esa feria, la profesora María Esmeralda Martínez. “Lo que hacemos es promover la obra de los maestros, es muy importante conocer las experiencias de los docentes que integran el Sindicato y facilitarles los caminos, formas y espacios para proyectar en un texto la maravilla de trabajar frente a un grupo escolar”.
Actualmente, el FEM tiene registrados 1,966 autores que se integraron a través de convocatorias difundidas entre los maestros de todo país, por medio de las 19 plataformas de comunicación con las que cuenta el SNTE.
En las convocatorias se establecen seis temáticas sobre las cuales pueden escribir: Educación, Investigación y Divulgación, Arte y Cultura, Sindicalismo, Ciencia y Tecnología, así como Desarrollo Humano y Sustentabilidad.
Entre los requisitos se solicita que los trabajadores de la educación, activos o jubilados, pertenezcan al SNTE; que su obra sea vigente, no enmarque contextos políticos, ni de asociación partidaria y que sea laica.
“Vigilamos muy bien los procesos. Somos cuidadosos de que la obra de los trabajadores de la educación tenga estándares elevados. A partir de 2017 establecimos que la calidad de lo que se publica vaya acompañado por su organización sindical, pues no solamente es escribir, sino revisar los contenidos y editar el libro”, explica la profesora Martínez.
“El FEM evalúa el material que llega desde las 56 secciones sindicales. En el último año logramos publicar 70 obras inéditas, las cuales ya tienen el Número Estándar Internacional de Libros (ISBN por sus siglas en inglés) y están registradas ante el Instituto Nacional del Derecho de Autor. Cubrimos todos los procesos jurídicos que implica una obra editorial. No es tan sencillo, no es solo decidirse a escribir, sino que deben seguirse ciertos protocolos para evitar problemas como el plagio”.
Por ello, el trabajador de la educación que decida publicar un libro debe firmar un convenio editorial con el SNTE, en el que cede por tres años el usufructo de la obra, únicamente para su difusión y promoción con fines pedagógicos, didácticos y académicos.
En noviembre de 2013, cuando por primera vez el SNTE presentó los libros de los profesores en la FIL de Guadalajara, Díaz de la Torre manifestó que el programa era importante para “hacer visible el trabajo de los maestros más allá de las aulas”. La propuesta se inició con talleres de redacción y lectoescritura para los docentes, algunos impartidos por Felipe Garrido, reconocido integrante de la Academia Mexicana de la Lengua.
De esta manera, el Fondo Editorial del Magisterio, que se caracteriza por acoger a profesores de todos los rincones del país y de todas las lenguas, ha publicado títulos como “Nuestros mares”, “La magia de un poema”, “Tixtla, El refugio de los dioses”, “Los valores y la educación primaria”, “Educación artística en la educación preescolar”, “El carretón de la lectura” y “La letra que canta y juega”.
“Mucho de lo que escriben tiene que ver con su experiencia, por eso eligen temas de matemáticas o de reglas ortográficas, pero también maestros que son poetas y novelistas; otros comparten su experiencia de vida en diferentes estilos narrativos”, aclara Esmeralda Martínez.
Además, en esta 32 edición de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, el SNTE tiene programadas tres conferencias de talla internacional y en su stand ofrecerá 54 actividades, entre presentaciones de obras literarias, ponencias académicas y culturales, charlas con autores, así como talleres, explica la maestra Martínez.
“Presentamos talleres de temas específicos que nos interesa fortalecer, como desarrollo sostenible, ingeniería actitudinal y valores democráticos. Nos dimos cuenta de que, si lo hacemos a través del juego, los valores democráticos, por ejemplo, son atractivos para los participantes. Es muy vigorizante trabajar en el desarrollo sostenible, empoderamiento de las niñas o el cuidado del medioambiente a través de talleres que reúnen a muchos niños”.
Ante la imposibilidad estatuaria que representa para el SNTE comercializar y obtener ganancias de una obra literaria, el camino alterno es la digitalización del libro para que pueda ser difundido y llegar a una mayor cantidad de lectores:
“Los maestros no escriben para obtener recursos, quieren compartir sus experiencias. A cada autor le damos 250 copias físicas de su libro para que las comparta, pero lo primordial es la digitalización para que a través de la página del SNTE pueda mandárselo a miles de compañeros, seguidores, amigos, familiares. Por eso es importante seguir incentivando la digitalización de la obra, para que sea del dominio público y cualquiera tenga acceso a ella”.
Finalmente, Esmeralda Martínez dice que este programa editorial ha creado muchas expectativas entre los profesores mexicanos, pues “saben que se les ha abierto un foro, un canal por medio del cual, a través de sus cuotas sindicales, pueden dar a conocer su obra… Nuestro Sindicato está haciendo una proeza con el FEM debido al gran trabajo que implica editar, publicar y promocionar un libro. Lo hemos asumido como un compromiso para apoyar a nuestros agremiados”.
El FEM también ha tenido presencia en las ferias internacionales del libro de Coahuila, del IPN, en la Infantil y Juvenil FILIJ, la Feria Internacional del libro de Lima, Perú 2017 y en más de 40 encuentros culturales a escala nacional.