Una compleja cirugía que implicó sacar el útero de la madre con la bebé dentro salvó la vida de ambas en un hospital de Tlaxiaco, Oaxaca.
Juana Reyes Melchor de 30 años llegó al Hospital Rural IMSS de dicha comunidad con un parto aparentemente normal, sin complicaciones y con una placenta normal.
Sin embargo, tras ser ingresada tuvo intenso dolor púbico y sangrado. Al revisarla los médicos encontraron que sufría de preeclampsia con datos de severidad y en la sala de operación se le detectó placenta previa total (placenta que cubre totalmente el orificio cervical uterino) y placenta acreta invasión placentaria de la vejiga), señaló Marco Antonio Martínez Castellanos, director del Hospital Rural IMSS-PROSPERA No. 34.
La placenta acreta es considerada una urgencia obstétrica debido a su alta mortalidad materno fetal, ya que es causa de hemorragia masiva durante la atención del parto y posterior, así como lesiones a vejiga e intestinos.
#Entérate Médicos de #IMSSProspera extraen útero con bebé dentro para salvar la vida de madre e hija. ⚕️ ⚕️
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— IMSS (@Tu_IMSS) 3 de octubre de 2018
Por ello se decidió la interrupción inmediata de su embarazo de 35 semanas, lo que implicó la extracción total del útero con el feto dentro y el parto posterior, explicó el IMSS en un comunicado.
“Para evitar riesgos a la madre y a la bebé se decidió realizar una histerectomía total abdominal con feto in útero, es decir, la extirpación total del útero con el feto dentro y la extracción posterior del bebé. En la intervención nació una niña de 2.5 kilogramos”, señaló el IMSS.
La intervención evitó una hemorragia obstétrica, alteraciones de la coagulación y daño a otros órganos que pudieron haberle provocado la muerte de la madre.
La mujer y la bebé se encuentran bien y fueron dadas de alta a los pocos días.