El esquema de desvío de recursos públicos documentado en La Estafa Maestra no solo propició que 144 empresas fantasma o irregulares desaparecieran presuntamente más de 4 mil 600 millones de pesos de 11 dependencias del gobierno federal, a través de 8 universidades públicas. Además, 35 de esas empresas dejaron un agujero en la Hacienda pública de 5 mil millones por impuestos no pagados.
Así lo informó el Servicio de Administración Tributaria (SAT) a partir de una solicitud de información realizada por Animal Político, en la que señaló que hasta el momento llevan realizadas auditorías fiscales a 35 de las 186 empresas que, en total, participaron y se beneficiaron con miles de millones del erario gracias a La Estafa Maestra.
“Se iniciaron auditorías que concluyeron con adeudos a Hacienda por 5 mil millones de pesos, cuya recuperación se estima poco probable en virtud de que se trata de operaciones inexistentes realizadas por empresas fantasma”, detalló el SAT en su respuesta.
Una empresa fantasma es aquella que no tiene una dirección real, ni infraestructura, ni personal trabajando, ni realmente da servicio alguno. Son empresas de papel que no existen físicamente, y que habitualmente se utilizan para cometer ilícitos como, precisamente, es la evasión de impuestos, el lavado de dinero o el desvío de recursos públicos.
A un año de que se publicara la investigación periodística, Hacienda lleva recuperados 100 millones de pesos a raíz de auditorías fiscales realizadas a las empresas que participaron en el fraude, tal y como informó el pasado martes ante el pleno del Senado de la República José Antonio González Anaya, el titular de la dependencia federal.
No obstante, esta cifra supone apenas el 2% de los más de 4 mil 613 millones que desaparecieron del erario con las empresas fantasma.
El SAT realizó una nueva actualización de las empresas incluidas en su lista negra de sociedades fantasma, en la que incluyó a otra compañía que recibió recursos a través de La Estafa Maestra. Hasta el momento, suman 67 sociedades declaradas oficialmente por la autoridad como fantasma, y que participaron en el fraude.
La empresa es Impactel SA de CV. Esta sociedad recibió sin pasar por ninguna licitación 36 millones de pesos provenientes de la Secretaría de Educación Pública (SEP), a través de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM), para dar unos servicios que, además, no se cumplieron, tal y como denunció la Auditoría Superior de la Federación en un informe forense que puedes leer aquí.
Impactel forma parte de un grupo de siete empresas que fueron subcontratadas por la UAEM, por un convenio de 192 millones de pesos que le otorgó la SEP para digitalizar el archivo de cédulas profesionales, que serviría para crear un sistema público en línea que, sin embargo, nunca se concretó.
La UAEM subcontrató a Impactel en 2013, a pesar de que desde un año antes era investigada por la Procuraduría General de la República (PGR) por el presunto desvío de recursos de Conaculta y un servicio que tampoco cumplió. Peso a esto, el SAT tampoco la había investigado hasta ahora, cuatro años después, cuando ya la incluyó en su lista de sociedades fraudulentas que simulan operaciones comerciales.
De esta red de siete compañías vinculadas por accionistas, representantes legales y comisarios, cuatro ya fueron incluidas en la lista definitiva del SAT sobre empresas fantasma, y otros dos están en la lista de presuntas fantasma; es decir, están siendo todavía investigadas por presuntamente simular operaciones comerciales.
Entre las que ya son fantasma en forma definitiva, están la mencionada Impactel, más Servicios Corporativos Colorado S.C., Tecmasat Digitalización SA de CV, y Asesorías Contables y Jurídicas del Golfo de México S.C.
En el caso de Asesorías Contables y Jurídicas del Golfo de México, se visitó su domicilio en la Avenida Tláhuac, en la colonia Lomas Estrella, de la delegación Iztapalapa. Pero allí no se encontró a ninguna empresa, sino una modesta unidad habitacional donde los vecinos y el administrador del inmueble dijeron que nunca habían escuchado el nombre de la compañía, ni de su supuesto dueño.
El abogado representante de esta red de empresas, Jorge de los Ríos, concedió una entrevista a Animal Político y a Mexicanos contra la Corrupción previo a la publicación del reportaje La Estafa Maestra en septiembre del año pasado, y defendió la legalidad de las compañías, aunque nunca entregó la documentación que así lo acreditara. Sin pruebas, aseguró que los servicios supuestamente realizados por las empresas a la SEP, a través de la UAEM, se habían cumplido, y la Auditoría se había equivocado al señalar múltiples irregularidades.
Hace un año, cuando se publicó el reportaje, el SAT solo tenía incluidas a 8 empresas en su lista de empresas fantasma, y ahora ya son 67.
El SAT investiga además como presuntas fantasma a otras 9 empresas, mencionadas en el reportaje de La Estafa Maestra, que se quedaron con otros 226 millones de dinero público.
Sin embargo, éstas no fueron las únicas que se beneficiaron de los desvíos.
Otras 68 empresas que presentan un amplio abanico de irregularidades, como no contar con antecedentes registrales ante la Secretaría de Economía, o tener entre sus socios a prestanombres que viven en zonas marginadas y cuyos perfiles socio-económicos no se corresponden con los de compañías millonarias, ganaron otros 2 mil 095 millones del erario. A pesar de esto, no están siendo investigadas aun por la autoridad tributaria.
Hasta ahora, suman 144 empresas fantasma, o irregulares, que recibieron 4 mil 613 millones de pesos, gracias a que ocho universidades públicas hicieron de puente en los presuntos desvíos del dinero público que salió de 11 dependencias federales, quedándose además con mil millones como comisión solo por subcontratar a estas compañías fraudulentas.