
Andrés Manuel López Obrador, ganador de la elección presidencial del 1 de julio, dio a conocer este domingo un listado de 50 puntos para combatir la corrupción y que predomine una política de austeridad en el gobierno, desde el momento en que inicie su mandato.
Entre ellos, está reformar el artículo 108 de la Constitución, para que el presidente en funciones pueda ser juzgado por delitos de corrupción, además de suspender el fuero de los funcionarios públicos.
“La Fiscalía General contará en los hechos con absoluta autonomía, no recibirá consigna del presidente de la República”, dijo. “La Fiscalía Anticorrupción será garante para evitar este mal que tanto ha dañado a México y no permitir bajo ninguna consideración el predominio de la impunidad”, agregó.
“La Fiscalía Anticorrupción podrá actuar con absoluta libertad y castigar a cualquier persona que cometa un delito, de esa naturaleza, trátese de quien se trate, incluidos compañeros de lucha, funcionarios, amigos y familiares”.
Todos los funcionarios, continuó, deberán presentar sus declaraciones de bienes y patrimonial, y serán públicas.
Como presidente, dijo, ganará menos de la mitad de lo que percibe actualmente Enrique Peña Nieto, sin ningún tipo de compensación.
“Se reducirá en 50% el gasto de publicad del gobierno”, prometió López Obrador.
Otras medidas son bajar a la mitad, de manera progresiva, los sueldos de altos funcionarios, que actualmente perciban más de 1 millón de pesos anuales.
López Obrador también habló de reducir los gastos de viáticos al mínimo, y de que los funcionarios ya no tendrán guardaespaldas, a excepción de aquellos encargados de tareas de Seguridad Pública.
El ganador de las elecciones reiteró el compromiso de que los expresidentes ya no recibirán pensión.
“Los contratos de obra de gobierno se llevarán a cabo mediante licitación pública, con la participación de ciudadanos, y de observadores de la ONU”, dijo López Obrador, además de prometer que ya no habrá los llamados “moches”, para diputados o senadores, por gestionar obra pública para alguna zona del país.
Otro de los puntos fue el establecer que los funcionarios no podrán asistir al trabajo en estado de ebriedad, ni ingerir bebidas alcohólicas en las oficinas públicas.
Sobre las medidas planteadas, dijo que espera la comprensión de todos, ya que son puntos que fueron planteados durante su campaña, por lo que no hay engaño.
Al finalizar la conferencia, López Obrador dijo que no tendrá actividades públicas, de aquí hasta el próximo viernes 20 de julio.
La Fiscalía Anticorrupción podrá actuar con absoluta libertad y castigar a cualquier persona que cometa un delito de esa naturaleza, tratase de quien se trate, incluidos compañeros de lucha, funcionarios, amigos y familiares. Un buen juez, por la casa empieza.