Rusia reiteró que derribará los misiles que Estados Unidos lance en Siria
En un contexto de creciente tensión entre Washington y Moscú, el embajador ruso en el Líbano, Alexander Zasypkin, dijo que su país derribará los misiles que Estados Unidos lance en respuesta al supuesto ataque químico en Siria.
El diplomático reiteró las expresiones vertidas por figuras políticas y militares de su país, entre ellos el jefe de Estado Mayor de las Fuerzas Armadas rusas, Valeri Guerásimov.
Las declaraciones de Zasypkin se producen mientras se espera la "respuesta contundente" anunciada por el presidente estadounidense, Donald Trump.
El representante de Rusia (país aliado de Siria) ante la ONU, Vasily Nebeznia, instó EE.UU. a no actuar en la zona y advirtió que "serán responsables" por cualquier "aventura militar ilegal" que lleve a cabo.
La advertencia de se produjo durante una sesión del Consejo de Seguridad donde no se logró consensuar ninguna medida para investigar lo sucedido en la ciudad siria de Douma, en Guta Oriental.
En ese contexto, la agencia europea de tráfico aéreo, Eurocontrol, alertó a las compañías que tomen precauciones en el Mediterráneo oriental ante la posibilidad de ataques en Siria en las próximas 72 horas.
El barco de guerra estadounidense Donald Cook se encuentra en aguas del Mediterráneo.
Un Consejo polarizado
EE.UU. y Rusia bloquearon mutuamente sus propuestas, haciendo uso del poder de veto que ambos ostentan por ser miembros permanentes del Consejo de Seguridad.
El borrador estadounidense pretendía otorgarles a los investigadores la facultad de atribuir culpas por el supuesto ataque, mientras que el texto ruso proponía dejar eso en manos del propio Consejo de Seguridad.
Un equipo de la Organización para la Prohibición de Armas Químicas (OPCW, por sus siglas en inglés) está a punto de partir hacia Siria para determinar si se usó o no ese tipo de material en Douma.
La OPCW, sin embargo, no buscará identificar a los responsables del hecho.
La Organización Mundial de la Salud (OMS), por su parte, exigió el "acceso sin obstáculos" a Douma para verificar los informes de sus socios de que 500 personas se han visto afectadas por un ataque químico allí.
Acusaciones cruzadas
En la sesión del Consejo de Seguridad, los representantes de Moscú y Washington volvieron a cruzar acusaciones.
Nebezia dijo que EE.UU. intentaba "plantar una resolución" como un "pretexto para justificar acciones militares".
"Podríamos encontrarnos en el umbral de eventos muy tristes y serios", dijo.
La representante estadounidense Nikki Haley, por su parte, calificó la votación como una "parodia".
"Rusia ha destrozado la credibilidad del Consejo de Seguridad", afirmó.
"Siempre que proponemos algo significativo para Siria, Rusia lo veta", expresó.
La fuente de esta última controversia entre las dos potencias es un supuesto ataque químico ocurrido el pasado sábado en Douma.
Activistas opositores sirios, médicos y socorristas denunciaron que se produjo un bombardeo con proyectiles cargados con sustancias tóxicas.
Las estimaciones del total de víctimas oscilan entre 40 y 60 personas. La OMS, en tanto, estimó que más de 70 personas murieron como consecuencia del ataque.
El gobierno sirio de Bashar Al Assad niega lo sucedido.
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