Ecuador castigó a Julian Assange.
Las autoridades ecuatorianas cortaron "los sistemas que permiten fundador de Wikileaks comunicarse con el exterior" desde la embajada de la nación latinoamericana en Londres, Reino Unido, donde Assange está refugiado desde 2012.
En un comunicado publicado este miércoles, la Secretaría Nacional de Comunicación de Ecuador explicó que adoptó la restricción "ante el incumplimiento por parte de Assange del compromiso escrito que asumió con el gobierno a fines de 2017, por el que se obligaba a no emitir mensajes que supusieran una injerencia en relación a otros estados".
El lunes, Assange cuestionó a aquellos que acusan a Moscú de ser responsable del envenenamiento hace unas semanas del exespía ruso Sergei Skripal y de su hija Yulia en Salisbury, Reino Unido.
El australiano también criticó la decisión de Reino Unido y de otros 20 países de expulsar a 140 diplomáticos rusos como represalia por el ataque, ocurrido el 4 de marzo.
"…si bien es razonable que Theresa May considere al Estado ruso como el principal sospechoso, hasta ahora la evidencia es circunstancial y la Organización para la Prohibición de Armas Químicas aún no ha confirmado nada de manera independiente, lo que permite que el Kremlin promueva al interior del país la idea de que Rusia es perseguida", dijo Assange en un tuit el lunes.
Al anunciar que cortó las comunicaciones de Assange, Ecuador dijo que "su comportamiento, con sus mensajes a través de las redes sociales, pone riesgo las buenas relaciones que el país tiene con Reino Unido, con el resto de estados de la Unión Europea y con otras naciones".
Assange recibió asilo político en la embajada de Ecuador en Londres en 2012, cuando Rafael Correa era presidente del país sudamericano.
El principal motivo del refugio era evitar la extradición de Assange a Suecia, donde debía enfrentar un interrogatorio por acusaciones de acoso sexual y violación, delitos que el fundador de Wikileaks siempre ha negado.
Las autoridades suecas suspendieron la investigación en 2017, pero Assange teme ser extraditado a Estados Unidos por la publicación de información clasificada en WikiLeaks en 2010.
En 2016, Ecuador suspendió brevemente la conexión a internet de Assange después de que publicara correos electrónicos hackeados de John Podesta, entonces jefe de la campaña presidencial de la candidata demócrata Hillary Clinton.
En mayo de 2017, el presidente ecuatoriano, Lenin Moreno, pidió a Assange que se abstuviera de expresar públicamente su apoyo a la independencia de Cataluña después de que tuiteara que Madrid era culpable de "represión".
El gobierno de Moreno ha dicho que mantendrá el asilo de Assange. Pero también ha buscado la forma de que abandone la embajada sin que sea arrestado.