Yulia, la hija del exespía ruso Sergei Skripal, salió de la condición crítica en que fue ingresada en el hospital tras ser envenenada junto a su padre con un agente nervioso hace cuatro semanas.
El hospital donde está internada informó este jueves que la joven "se recupera rápidamente".
"Ella ha respondido bien al tratamiento, pero sigue recibiendo atención médica 24 horas al día", dijo el hospital en un comunicado, donde agrega que permanece en condición estable.
El caso de Yulia y Sergei Skripal, que según las autoridades británicas fueron envenenados por órdenes del Kremlin, provocó la expulsión de decenas de diplomáticos rusos de 25 países aliados de Reino Unido en lo que se considera una de las mayores crisis diplomáticas entre Rusia y Occidente.
El gobierno de Vladimir Putin niega haber participado en el incidente.
Padre e hija fueron encontrados en una banca del centro comercial Maltings y la policía investiga el caso como un intento de asesinato.
Las exámenes forenses arrojaron que la mayor concentración del agente nervioso fue encontrado en la puerta de la casa del exespía.
La primera ministra británica, Theresa May, dijo que la sustancia química utilizada en este caso forma parte de un grupo de agentes nerviosos desarrollados por Rusia, conocidos como Novichok.
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