En cerca de 300 planteles escolares de Guerrero, maestros y padres de familia han decidido cerrar como medida de precaución ante amenazas de grupos delictivos en la zona de la montaña baja del estado.
[contextly_sidebar id=”dFqYJDIB0VRbPJ9XAqvN0GN0p5Lbt5qM”]De acuerdo con el vocero de Seguridad de la entidad, Roberto Álvarez Heredia, las amenazas se presentaron después de la reanudación de clases tras el sismo del 19 de septiembre en los municipios de Chilapa, Zitlala, Atlixtac, Ahuacuotzingo y José Joaquín de Herrera.
El funcionario explicó que no ha habido ninguna víctima de un agresión directa por estas amenazas (vía redes sociales), por lo que han pedido a las instituciones volver a operar.
“La Secretaría de Educación Guerrero envió una circular para pedir que se reabran las escuelas desde este lunes, pero muchas escuelas siguen en cierre por el temor que provocan las amenazas”, explicó el vocero en entrevista.
Las amenazas han afectado a todos los niveles escolares, pues este 6 de noviembre, el rector de la Universidad Autónoma de Guerrero (UAG), Javier Saldaña Almazán, dijo que los estudiantes de la Preparatoria 26 de Chilapa llevan un mes sin clases por problemas de inseguridad, de acuerdo con un reporte de El Sur.
Incluso, pondrán en marcha un sistema en línea para que los alumnos no pierdan el semestre escolar, apuntó el sitio de noticias Digital Guerrero.
De acuerdo con el vocero de Seguridad, el Grupo de Coordinación Guerrero ha impulsado acciones como puntos de revisión carreteros realizados por el Ejército y Policía Estatal, así como patrullajes de día y noche y la implementación de una mesa de inteligencia para buscar a los presuntos responsables de la violencia en la zona.