En Morelos la ayuda fluye. Cada hora, cientos de personas ingresan al municipio de Jojutla en vehículos o camionetas repletos de víveres, agua, ropa, maquinaria pesada y herramientas de trabajo.
Además, vecinos de la zona que no resultaron afectados por el sismo, se han organizado para recibir y clasificar la ayuda.
En la avenida Lázaro Cárdenas, la calle principal de Jojutla, los vehículos marchan a vuelta de rueda y es un caos transitar por la zona.
La gente llega de Cuernavaca, Jiutepec, Toluca, y otros municipios del centro del país que no resultaron afectados por el sismo.
Sinhuel, originario de Cuernavaca, es estudiante de derecho en la Universidad Autónoma del Estado de Morelos. Junto con 40 de sus compañeros se coordinaron para traer apoyo humanitario a Zacatepec y Jojutla.
Luego de convocar a la solidaridad a través de redes sociales, los jóvenes universitarios lograron reunir 3 camionetas y vehículos con víveres, agua y ropa.
“Todos como país tenemos que hacer algo por el prójimo, a cualquier nos pudo pasar y lamentablemente ocurrió en una zona que económicamente no se encuentran bien”.
Sinhue reconoció que al igual él y sus compañeros, hay decenas de grupos estudiantes que se han organizado para enviar el apoyo recolectado.
Alejandro Meneses, originario de Toluca, es otro de los voluntarios que ha traído apoyo para las personas de Zacatepec, Morelos.
“Me mueve venir porque nunca veo a mí país unido y desgraciadamente cuando ocurre una tragedia es cuando nos unimos”.
Desde el día del sismo, el pasado martes, él y cuatro amigos se dieron a la tarea de recolectar algunos víveres, tomar un coche, y recorrer las zonas afectadas para brindar apoyo y ofrecerse como voluntarios.
Asegura que le ha costado trabajo llegar a un lugar donde realmente se necesita su ayuda.
Constanza Lechuga es una joven de la Ciudad de México que, junto a otras amigas y amigos, decidió llevar ayuda a la comunidad de San Francisco Xochiteopan, Puebla, afectada por el sismo.
Se trata de una comunidad que perdió 233 casas y que este jueves serán demolidas por protección civil por su propia seguridad.
Constanza platica que tras el sismo ella y su papá decidieron acudir a la organización Cadena, donde en menos de 3 horas habían reunido un camión con materiales, comida y agua. Fue en esa organización donde se buscó a voluntarios para viajar a Puebla y sin saber a dónde se iban a dirigir exactamente, se ofreció de voluntaria.
“En este momento tenemos mucha agua, comida y ropa, lo que estamos necesitando son tiendas de campaña ya que este va a ser el techo donde la gente van a vivir por mucho tiempo”.
No sólo eso. En esta comunidad de poco más de 1,000 habitantes van a necesitar materiales de construcción para que poco a poco puedan ir reconstruyendo sus casas y sus vidas.
Constanza informó que próximamente en conjunto con operation blessing (operación bendición), una organización internacional de apoyo humanitario, planean regresar a reconstruir casas para más de 300 familias de San Francisco Xochiteopan.
“Mientras tanto es vital nuestra ayuda. Lo que estamos haciendo es por amor, necesidad y ayuda. Hay muchos niños y niñas que necesitan resguardo”.
Para eso, las donaciones que se hagan para esta comunidad se están recibiendo en Hacienda Ermita casa #8, Hacienda de las Palmas, Estado de México.