Videos y fotografías permiten observar a personas tomando en cubetas, garrafas y otros objetos el combustible de Pemex que se derramó de una toma clandestina en la comunidad de San Francisco Tláloc, en el municipio de San Matías Tlalancaleca, para luego transportarlo en camionetas.
[contextly_sidebar id=”HyKSPpA8LQAUWxUjrzh7E0fymd3CGTUS”]En la zona había militares y policías, quienes solo los observaron.
El Grupo de Coordinación Puebla Segura, en un comunicado, indicó que elementos de las policías estatal, militar y municipal acudieron a la toma clandestina, pero para evitar una situación de riesgo decidieron no intervenir.
“Ante la presencia de gente, presuntamente de la comunidad, que irresponsablemente llevó niños al lugar, se tomó la decisión de evitar cualquier tipo de enfrentamiento con la población y evitar así el riesgo que representa cualquier fricción con el combustible”, señaló el Grupo.
“Ante esta situación, fue imposible detener a los habitantes, entre los que se encontraban mujeres y niños, para evitar que robaran el combustible”, agregó.
Personal de Pemex acudió para sellar la toma clandestina.
“Esto ya es provocado para que de manera libre puedan estar cargando el hidrocarburo”, dijo sobre la fuga en la toma clandestina Adrián Flores, regidor de Gobernación de Tlalancaleca, de acuerdo con el diario Reforma.
“Nosotros aplicando el criterio dejamos que lo junten y sólo aplicamos medidas preventivas para que sea a una distancia considerable de la toma”, agregó.
El pasado 4 de mayo, una serie de enfrentamientos entre fuerzas armadas y presuntos ladrones de combustible, conocidos como huachicoleros, dejó un saldo de 10 personas muertas en el municipio de Palmar de Bravo, Puebla.
Con información de Reforma (suscripción necesaria) y Diario Cambio