[contextly_sidebar id=”H08LqPv7JDvwWY1O3v8jmLBrF5qtuMBj”]Minutos antes de ser asesinado por dos hombres armados, el periodista Cecilio Pineda compartió, desde su página de Facebook, dos videos sobre la exigencia de comunitarios de San Miguel Totolapan, Guerrero, al gobernador Héctor Astudillo, para que detuvieran a Raybel Jacobo de Almonte, líder de los Tequileros, por lo cual anunciaban paros de clases en más de 120 escuelas de ese municipio.
Cecilio Pineda era un periodista especializado en temas policiacos en la región de Tierra Caliente, en Guerrero, zona que actualmente atraviesa por fuertes problemas de seguridad, producto de la violencia ejercida por la célula criminal que opera ‘el Tequilero’, dedicada al narcotráfico, la amenaza y la extorsión.
El periodista vivía bajo amenaza desde el 18 de septiembre de 2015, día que un sujeto armado le disparó cuando llegaba a su casa, donde se encontraban su esposa e hijas, pero el agresor no dio en el blanco.
Durante su escape, el agresor le dijo a Cecilio Pineda que los disparos eran un mensaje enviado por sus publicaciones periodísticas y escapó junto a su cómplice, a bordo de una motocicleta.
El fallido atentado contra Cecilio Pineda provocó que el Mecanismo de Protección para personas Defensoras de los Derechos Humanos y Periodistas de la Secretaría de Gobernación (Segob) se pusiera en contacto con él, para invitarlo a su incorporación, según una tarjeta cronológica enviada por Gobernación a solicitud de Animal Político.
En su respuesta, Gobernación sostiene que el 23 de septiembre de 2015, el Mecanismo realizó el estudio de evaluación de acción urgente, otorgando como medidas: la extracción, un refugio para el periodista y su familia y acompañamiento por la Policía Federal para traslado al refugio. Según la Segob, Cecilio Pineda les respondió que por cuestiones de salud no podría trasladarse.
El 10 de noviembre de 2015, casi dos meses después del atentado, el Mecanismo visitó por primera vez al periodista, quien ya era considerado “beneficiario” de esta instancia, para realizar la entrevista, la inspección de entornos y la verificación de desplazamientos.
El 14 de noviembre, el Mecanismo realizó la evaluación de riesgo y propuso como plan de protección: “refugio de seguridad, alimentos y curso de FEADLE para el periodista, su esposa y sus hijas”.
Lo que señaló Gobernación en su cronología del caso, es que, tras haberse aprobado el refugio para Cecilio Pineda y su familia, el periodista nunca aceptó trasladarse o simplemente no fue localizado, aún cuando la propia dependencia recibía informes donde se le indicaba que la Secretaría de Seguridad Pública de Guerrero realizaba rondines en su domicilio.
Fue hasta el 13 de octubre de 2016, que el Mecanismo contactó nuevamente al periodista para informarle de una segunda evaluación de riesgo, en la cual, un día después, el 14 de octubre, le dijeron que concluirá su caso “en virtud de que no se identificó riesgo” para él.
Dos semanas después, Cecilio se comunicó nuevamente con una analista del Mecanismo, a quien le informó que había recibido una amenaza.
Según la versión de la Segob, la Junta de Gobierno le propuso nuevamente al periodista un plan de protección, el refugio y alimentos para él y su familia, pero Cecilio Pineda se negó a trasladarse.
Se trata de la última información que ofreció de manera oficial la Segob sobre el periodista, quien fue asesinado el pasado jueves por la noche, casi cinco meses después de que la Unidad de Evaluación de Riesgo del Mecanismo determinó concluir su caso por la inexistencia de riesgos para su persona.