En un solo año los robos en el interior de las estaciones del Metro se dispararon más de 65%. De enero a noviembre de 2016 se registraron más de 670 robos, cantidad que ya supera a todos los robos que se cometieron anualmente desde 2013 y que crecerá aún más con los casos que se hayan acumulado en diciembre.
[contextly_sidebar id=”u8Fqaupak807iRXt9sVvOrkj75QnwiYg”]Datos oficiales de la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México sobre la incidencia del delito de robo a pasajeros del Metro arroja que en los primeros 11 meses de 2016 se iniciaron 673 averiguaciones y carpetas de investigación por este delito. La cifra incluye robos cometidos con y sin violencia.
Esto representa un incremento del 66% en comparación con los 404 atracos registrados oficialmente por la Fiscalía Especializada en Delitos cometidos en el Metro en el mismo periodo de 2015.
Para dimensionar el crecimiento, en un solo año el promedio de robos pasó de 1.3 robos cometidos a pasajeros al día en 2015 a al menos dos atracos cada 24 horas en 2016.
El nivel de robos a pasajeros registrado en 2016 no solo es el mayor del actual sexenio sino que además fortalece una tendencia al alza en este delito desde 2013. En aquel año se registraron, según los datos proporcionados vía transparencia por la Procuraduría, un total de 376 casos, para 2014 fueron 401, y en todo 2015 la cifra es de 469.
Eso representa un incremento de casi el 80% en la incidencia de los robos en el interior del Metro en un periodo de tres años. Este nivel será superior una vez que se conozcan los robos registrados en diciembre pasado en el Metro y se sumen a lo acumulado en los otros once meses de 2016.
Aunque no hay forma de comprobarlo, se estima que el nivel de robos cometidos diariamente en el Metro es mucho mayor si se toma en cuenta que el 90% de los casos no se denuncian ante el Ministerio Público, según las encuestas realizadas por el INEGI.
Hay robos que están impunes. De acuerdo con información revelada vía transparencia por el Metro entre enero de 2010 y septiembre de 2016 se detuvo a 946 presuntos responsables pero en ese mismo lapso se registraron dos mil 844 atracos.
Lo anterior significa que en promedio hay una persona detenida por cada tres robos que se denuncian ante el Ministerio Público.
Los datos de la Procuraduría revelan que el Metro no es el único transporte público en donde han subido los robos. De enero a noviembre de 2016 se registraron 647 averiguaciones por robo en Trolebús, Tren Ligero y camiones de la Red de Transporte Público (RTP). Esto es un incremento superior al 23 por ciento en comparación con los 526 casos registrados en el mismo periodo pero de 2015.
De acuerdo con la información del Gobierno capitalino los robos en contra de usuarios del Metro se cometen tanto con violencia (verbal o física) así como sin violencia. En la mayoría de los casos el objetivo de los atracos son teléfonos celulares, carteras, bolsas, y mochilas.
La Procuraduría General de Justicia capitalina no revela de forma desglosada el sitio preciso de cada uno de los robos que tiene registrados, pero si indica que la mayor probabilidad de atracos se presenta en las estaciones con mayor afluencia de pasajeros.
En octubre pasado la Procuraduría informó que como parte del “Operativo Metro” que se despliega en estaciones de alta afluencia de pasajeros se detuvieron a 18 personas que se dedicaban a robar a los usuarios.
Datos del Sistema de Transporte Colectivo Metro revelan cuales son las estaciones que tienen la mayor demanda de pasajeros y que por lo tanto presentan una mayor probabilidad en la comisión de algún robo.
Las estaciones de la terminal Pantitlán que corresponden a las líneas A, 5 y 9 se ubican entre las diez con la mayor afluencia de pasajeros, con un promedio que va de los 120 mil a los 130 mil usuarios en un día laboral regular.
La terminal de Indios Verdes es la segunda con el mayor número de personas transitando con 122 mil pasajeros promedio al día en 2016, seguida de la terminal Cuatro Caminos con 113 mil usuarios en promedio diarios.
El top ten lo completan las estaciones Constitución de 1917, Universidad, Taxqueña, Observatorio e Insurgentes.
En cuanto a las líneas con mayor afluencia de pasajeros y que en consecuencia, presentan el mayor riesgo de robos, la Línea 2 que corre de Taxqueña a Cuatro Caminos tiene la mayor demanda con más de 286 millones de pasajeros transportados en un año, seguida de la Línea 1 con2 67 millones y Línea 3 con 234 millones.
Las cámaras de seguridad instaladas por el Sistema de Transporte Colectivo Metro han captado ya como operan los ladrones aprovechando las aglomeraciones en las estaciones de alta demanda.
Por ejemplo, un sujeto apodado “El Llanero” simulaba empujar a los pasajeros para que entraran en un vagón saturado, pero al mismo tiempo aprovechaba para sacarle una cartera o teléfono celular de sus pertenencias.
Entre los años 2010 y 2013 el gobierno capitalino invirtió más de 25 millones de pesos para la adquisición de 39 equipos de detección conocidos popularmente como arcos detectores de metales. Esto con el objetivo de fortalecer la seguridad en las estaciones y detectar armas de cualquier tipo u objetos peligrosos que se buscara ingresar dentro de las instalaciones.
El problema es que varios de estos arcos no sirven y tampoco hay procesos de reparación en curso. Simplemente se encuentran instalados en más de 30 estaciones de alta demanda pero sin que funcionen.
Datos revelados vía transparencia gubernamental al responder las solicitudes folios 0325000152416 y 0325000155116 evidencian que por lo menos hasta el pasado 28 de octubre había equipos sin funcionar debido a que presentaban “averías” que no han sido reparadas. El Metro precisó una cantidad.
En el mismo documento el Sistema de Transporte Colectivo Metro revela que se firmaron los contratos con dos proveedores distintos para la adquisición de los equipos pero en cuanto al tema del mantenimiento, los procesos de contratación apenas estaban en curso. Debido a esto no se proporciona servicio a estos equipos.
El Metro también reveló en otra solicitud que en los últimos tres años ha contratado a mil 950 policías auxiliares y bancarios para reforzar la seguridad en las estaciones con mayor demanda. Los datos revelan que pese a esto la incidencia delictiva se mantiene al alza en este medio de transporte público.