[contextly_sidebar id=”y7LYipA1Nqojz4AhoruB1fYCZrv8CZ4w”]Trabajadores sindicalizados del Ayuntamiento de Mexicali y de la Oficina de Recaudación de Rentas se enfrentaron con un grupo de manifestantes que tenían tomadas oficinas gubernamentales en Baja California para protestar por el gasolinazo y la privatización del agua potable en la entidad.
El enfrentamiento ocurrió luego de que, durante la madrugada de este miércoles 18 de enero, los manifestantes acordaron levantar la toma del Congreso, del Ayuntamiento de Mexicali y del Poder Ejecutivo estatal hasta que los diputados locales aprueben la abrogación de la Ley del Agua, que presentó el gobernador, Francisco Vega.
Alrededor de las 08:00 horas, un grupo de trabajadores municipales y estatales llegó a las instalaciones tomadas para ingresar a sus puestos de trabajo, indica un reporte del diario La Jornada de San Luis.
En el Palacio Municipal de Mexicali ocurrieron los hechos más violentos, ya que alrededor de un centenar de burócratas, encabezados por la diputada local Victoria Bentley, ingresó a la fuerza a las oficinas del Ayuntamiento.
Luego del enfrentamiento, la diputada local criticó la postura de los manifestantes, al señalar que “por un grupo de 200 personas no se han podido retomar las actividades”, ya que “tienen paralizados los servicios públicos”.
Durante el desalojo del Palacio de Gobierno de Mexicali, el grupo de burócratas estuvo acompañado por un notario público, quien dio fe del cierre de las instalaciones y oficinas, las cuales no presentan daños visibles.
Otra de las oficinas gubernamentales que fue desalojada fue el edificio de Recaudación de Rentas del estado. En ese caso, la agrupación de motociclistas que mantiene tomadas las instalaciones acordó con el subsecretario de Gobierno, Francisco Iribe, retirar los candados y cadenas de las puertas y permitir el acceso a los trabajadores estatales; sin embargo, el lugar fue tomado por jóvenes y adultos mayores.
Los edificios ubicados en el Centro de Gobierno continúan tomados por los manifestantes y resguardados por la policía municipal y estatal.
El enfrentamiento ocurrió un día después de que el gobernador de Baja California, Francisco Vega, envió al Congreso del Estado una iniciativa para abrogar la nueva Ley de Agua estatal, publicada el pasado 30 de diciembre.
Con información de La Jornada San Luis.