[contextly_sidebar id=”s2ff5i6Rh8IGqt78aJGIhuiitjKm0KIo”]Luego de que ciudadanos denunciaran que el día del enfrentamiento en Nochixtlán, Oaxaca, policías federales detuvieron a sus familiares en un funeral, el comisionado general de la Policía Federal, Enrique Galindo, defendió que las detenciones del domingo 19 de junio “no fueron al azar” o “por hacerse”.
Galindo dijo en entrevista con Denise Maerker, en Radio Fórmula, que las detenciones se realizaron en el “contexto del desalojo” y que si el Ministerio Público determina que los detenidos no tienen responsabilidad en el hecho saldrán libres.
Pobladores de Nochixtlán dijeron a Animal Político que 18 de las 23 detenciones del domingo se realizaron en el cementerio del pueblo, y que los detenidos eran personas que ayudaban a cavar una tumba.
De acuerdo con los testimonios de los pobladores, fueron unos 20 policías federales los que arrestaron a las 18 personas. Les ordenaron hacer dos filas y poner las manos en la nuca; finalmente, los trasladaron encimados en un camión, según una imagen que circuló en redes sociales.
También dijeron que desde las 8:30 de la mañana se percibió el efecto de gases lacrimógenos en el panteón. Al respecto, Galindo reiteró que al inicio del operativo de desalojo, los elementos de seguridad no usaron gases ni armas de fuego. “Hasta ese momento (las 8:30 horas) no hay policía armada en el lugar“, dijo.
Agregó que las detenciones “se llevaron en varios momentos y por las dos corporaciones (estatal y federal)”.