[contextly_sidebar id=”9DS6urWZQgGOV00WfvTyzuadm1ecG82K”]Corea del Norte afirma haber realizado una prueba subterránea de una bomba de hidrógeno, un arma más poderosa que las bombas atómicas que han ensayado hasta ahora.
La BBC habló con los expertos nucleares y de defensa Ankit Panda, James Acton y Bruce Bennet sobre la reciente prueba.
Hasta ahora, no mucho. Sabemos que ha generado ondas sísmicas equivalentes a un terremoto de magnitud 5,1, pero los analistas del Tratado de Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares (CTBT, por sus siglas en inglés) dicen que equivalió a un sismo de 4,9.
Calcular exactamente qué tan poderosa fue la explosión –conocido como el rendimiento- depende de qué tan profunda fue la prueba.
Los estimados iniciales son en el rango de entre 10 y 15 kilotones, según Bruce Bennet, un alto analista de defensa de la Rand Corporation, lo que la hace un poco más grande que la prueba de 2013, pero no cree que se la suficiente grande para una bomba de hidrógeno.
Algunos informes dicen que el rendimiento fue aún menor.
Se cree que las pruebas norcoreanas en 2006 y 2009 fueron con dispositivos de fusión de plutonio pero se especula que la prueba de 2013 fue con uranio enriquecido, aunque esto no ha sido confirmado.
“En general, los dispositivos de uranio son mucho más difíciles de fabricar y operar”, dice Ankit Panda, editor asociado de The Diplomat, una revista de análisis para Asia-Pacífico.
Una prueba basada en un dispositivo de uranio representaría mayores peligros porque el enriquecimiento de plutonio para armas se realiza en instalaciones que son más fáciles de detectar, mientras que el enriquecimiento de uranio usa muchas centrífugas, probablemente más pequeñas, que se pueden esconder.
Además, Corea del Norte ha agotado sus existencias de plutonio de calidad armamentista pero tiene abundantes reservas de mineral de uranio.
Cualquiera que sea el material base, el significado de una bomba H es que utiliza un proceso llamado fusión nuclear y genera una explosión muchísimo más poderosa que una bomba atómica, que usa fisión nuclear.
La magnitud estimada de la explosión sugiere que no tuvieron éxito en detonar un dispositivo completamente termonuclear, según los expertos, donde se esperaría una explosión cercana a los 100 kilotones o más.
“Tentativamente hablando, parece demasiado pequeña para ser una bomba de hidrógeno“, señaló a la BBC James Acton, codirector del Programa de Política Nuclear del Fondo Carnegie para la Paz Internacional.
Dependiendo de la profundidad de la prueba, es posible que la explosión fuera parcialmente “amplificada”, o sea que pudieron haber usado una pequeña cantidad de fusión nuclear.
Bruce Bennet dice que si hubiese sido un dispositivo termonuclear completo, hubiera generado una medida sísmica de “alrededor de 7 en la escala de terremotos”.
Una manera de saber con más certidumbre que fue lo que se detonó sería a través del material radiactivo despedido en el sitio de la prueba que se pueda tomar de muestras atmosféricas.
Estados Unidos estará sobrevolando con una aeronave Constant Phoenix WC-135 para analizar la atmósfera.
Otros países también estarán tomando sus propias muestras, “pero no hay garantía de que algo se haya filtrado”, según Acton.
Entretanto, más análisis sísmicos detallados, de parte del CTBT y otros, deberían dar una idea más clara de la profundidad y potencia de la prueba.
Los resultados podrían durar días o semanas en salir. Y es probable que nunca tengamos una clara imagen de qué fue probado y cuánto éxito tuvo.
En 2013, el CTBT dijo haber detectado un poco de radiación 55 días después.
Aún si Corea del Norte no tuvo éxito probando una bomba H, el hecho demuestra que su programa nuclear continúa a paso firme, una preocupación significativa para la mayoría de los observadores.
Si, en efecto, fue una bomba H, representaría un avance significativo de ese programa. De todas maneras, Pyongyang está anunciando abiertamente sus ambiciones.
Las condenas internacionales están llegando de todas partes pero los expertos dicen que la reacción de los aliados de Corea del Norte, especialmente China, es crucial.
Como en 2013, Corea del norte afirmó haber tenido éxito con la prueba de un dispositivo miniaturizado.
“La miniaturización es significativa porque esa es la diferencia entre detonar un dispositivo nuclear en tierra y lograr colocarlo en un misil balístico intercontinental o en un misil balístico lanzado desde un submarino“, indicó Ankit Panda.
De ser eso verdad, le permitiría amenazar a los países vecinos y, potencialmente, hasta a EE.UU.
Pero muchos expertos manifiestan escepticismo.
“Realmente no sabemos”, expresa Bruce Bennet, que señala la posibilidad de determinar el tamaño de una explosión con los datos, pero verificar su diseño es más difícil.
Cualquiera que sea la realidad de esta prueba, en términos diplomáticos, los observadores dicen que acaba con todas las esperanzas de un regreso al diálogo de las Seis Partes para la eliminación de las armas nucleares.