[contextly_sidebar id=”H5uyTe7PMcIHNssC5Xw0W4It4hre1ne7″]Integrantes de la Policía Federal cometieron graves violaciones a derechos humanos durante dos eventos ocurridos el pasado 6 de enero en Apatzingán, Michoacán, confirmó este miércoles 25 de noviembre la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).
En su recomendación, la CNDH resolvió que hubo “uso excesivo de la fuerza” en contra de cinco personas que fallecieron y cometió una ejecución extrajudicial en contra de otra.
Desde que se dio a conocer el caso, el entonces comisionado nacional para la seguridad de Michoacán, Alfredo Castillo, cayó en contradicciones, de acuerdo con la recomendación presentada este miércoles por la CNDH.
El mismo 6 de enero, el excomisionado Castillo dijo: “Por la madrugada tuvimos hechos violentos en Apatzingán, derivados del levantamiento del plantón que había y de una agresión que sufrieron las fuerzas federales y estamos recibiendo algunos reportes. Ya hay detenidos”.
De acuerdo con la CNDH, “aproximadamente a las 02:34:17 horas del 6 de enero de 2014, 44 policías federales y 287 elementos del Ejército Mexicano realizaron un operativo en las inmediaciones de la Presidencia Municipal de Apatzingán, Michoacán, debido a que, según informaron a este Organismo Nacional, les fue comunicado que se encontraba un grupo de personas armadas”.
En la recomendación, la CNDH establece que 18 personas resultaron heridas, mientras que una persona perdió la vida durante esos hechos.
Alfredo Castillo aseguró que las personas muertas durante el segundo evento ocurrido en Apatzingán fueron víctimas del fuego cruzado. “Con las trayectorias, con el calibre de las balas y con la huella balística se logró acreditar perfectamente el fuego cruzado, de acuerdo a las trayectorias e impactos que tiene el vehículo”, dijo.
En contraste, la CNDH señala que en el segundo evento hubo “uso excesivo de la fuerza que derivó en la privación de la vida de 5 personas, así como la ejecución extrajudicial de una más, atribuible a policías federales”.
El comisionado de la Policía Federal, Enrique Galindo, también cayó contradicciones, ya que aseguró que “quedó muy claro desde el principio que la Policía Federal actuó dentro de sus protocolos” y que los elementos de esa corporación que participaron en los hechos en Apatzingán utilizaron “la fuerza de manera racional conforme a las circunstancias”.
En su recomendación, la CNDH atribuye violaciones graves a derechos humanos, atribuidas a elementos de la Policía Federal, consistentes en el uso excesivo de la fuerza, que derivó en la muerte de 5 personas y la ejecución extrajudicial de una más.