[contextly_sidebar id=”L5FrMz8fyM1FMZ0G2bRLV6vESwoapfZ7″]Una bebé estadounidense de un año recibió un disparo en la espalda por parte de soldados mexicanos cuando el vehículo en el que viajaba con su familia, cerca de la frontera norte de México, al parecer quedó en medio de una patrulla militar y un vehículo de presuntos delincuentes durante una persecución.
El delegado de la Procuraduría General de la República en el estado fronterizo norteño de Tamaulipas, Guadalupe Salinas, dijo que otra bebé de ocho meses que iba en el carro resultó con rasguños por una bala, mientras que una mujer sufrió algunas heridas menores por esquirlas o fragmentos de vidrio.
El funcionario informó este miércoles 28 de octubre que las heridas de las bebés no ponen en riesgo su vida. La menor que recibió el disparo es atendida en San Antonio, Texas.
La mujer herida es la mamá de una de las bebés. Las tres, ciudadanas estadounidenses, al parecer visitaban a familiares la semana pasada cuando resultaron heridas.
La persecución que derivó en el tiroteo que las hirió ocurrió hace una semana cerca de la localidad de Camargo, en la frontera con Rio Grande, Texas, pero los reportes no fueron confirmados sino hasta ahora.
El área es dominada por el cartel del Golfo y ha sido escenario de batallas entre facciones rivales de esa organización y del grupo rival de Los Zetas.
“Iban siguiendo una camioneta los militares (y) se atravesó en ese momento (la familia)”, dijo Salinas.
Los soldados “creían que eran unos malhechores y llegaron a su carro y se dieron cuenta que no, que eran mujeres, o sea, las niñas y las señoras”, añadió.
El funcionario dijo que autoridades mexicanas han estado en contacto con la familia.
La embajada de Estados Unidos en México señaló que sabía de reportes de que un ciudadano estadounidense había resultado herido, pero que no podía dar más información debido a políticas de privacidad.