[contextly_sidebar id=”dKu5jIBdk2xC8uq4V8yv4PnSJIzgPiBW”]El grito de Alexis Sánchez cuando marcó su cobro que le dio el título de la Copa de América a Chile este sábado no solo era la celebración de un campeonato: era la suma de todas las frustraciones contenidas durante 99 años.
La Federación Chilena de Fútbol fue una de las encargadas de fundar la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol) en 1916 junto a Uruguay, Argentina y Brasil.
Y mientras los demás ganaban medallas olímpicas, mundiales y copas, los chilenos se tenían que conformar con los premios de consolación.
Hasta este sábado. Hasta el grito de Alexis Sánchez después de 120 extenuantes minutos, la selección que no ganaba nada puso una plaquita con su nombre en la base de madera del trofeo más legendario del mundo americano.
Venció 4-1 en los penales a la Argentina de Messi. Y alzó una copa.
La gente celebró en las calles con pitos y banderas hasta el amanecer, los jugadores fueron recibidos por la presidenta del país y salieron al balcón del palacio de La Moneda a ofrecer su victoria al pueblo… las cosas habituales que hacen los campeones.
“Tenemos aquí una camiseta que dice campeones 2015, es la primera vez en casi 100 años. Esta es una victoria histórica y es primera vez que Chile juega de forma tan maravillosa”, dijo la mandataria Michelle Bachelet.
Pero, ¿cómo logró Chile ganar uno de los torneos de fútbol más difíciles del mundo? ¿Cuáles fueron los factores fundamentales para semejante hazaña?
En BBC Mundo encontramos cinco puntos que fueron clave para la victoria de la selección de la estrella solitaria en esta Copa América.
No se trata de restar méritos, pero uno de los factores que más ayudaron al equipo a no perder los estribos fue su condición de local.
En ese sentido, jugar todos sus partidos en la capital, Santiago, le evitó trasladarse a otras sedes que hubieran significado cambiar del lugar donde tenían a sus familias cerca.
Pero sobre todo por el abrumador apoyo del público en el estadio Nacional: cada partido fue una fiesta para la “Roja” con las graderías llenas de banderitas.
Ni hablar de la final: el momento de los himnos erizó la piel inclusive a los extranjeros.
Al igual que Brasil en el 89, Uruguay en el 95 y Colombia en el 2001, Chile se convierte en el cuarto equipo en ganar en casa desde el nuevo modelo del torneo implementado en 1987.
Es innegable que uno de los equipos que más cosas mostró a nivel ofensivo fue Chile y eso se debió al buen nivel con el que llegaron algunos de sus jugadores insignia.
El más destacado fue el mediocampista de la Juventus de Italia, Arturo Vidal.
Sus goles y su manejo del mediocampo fueron la llave para que Chile se clasificara a la segunda ronda. Después retomó el liderazgo en la final, donde fue el hombre que comandó a Chile durante los 120 minutos.
Otro nombre que descolló durante el torneo fue el lateral derecho del Queen Park Rangers inglés, Mauricio Isla.
La mayoría del ataque chileno pasó por sus pies y, asociado con Vidal, creó la mayoría de las mejores llegadas de la selección.
Otras figuras decisivas fueron el goleador del torneo Eduardo Vargas, el portero del FC Barcelona Claudio Bravo, el defensa del Inter de Milán Gary Medel y Jorge “el Mago” Valdivia.
Tal vez el hombre que menos mostró a pesar de la gran expectativa que generó fue el delantero del Arsenal Alexis Sánchez, quien no tuvo una buena presentación a lo largo de la Copa América.
Pero será su nombre y su figura la que saldrá en los videos de internet cuando la búsqueda sea: “Chile Campeón“.
En la madrugada del 17 de junio se supo que Arturo Vidal, uno de los mejores futbolistas de la llamada generación dorada del fútbol chileno, era arrestado por conducir bajo los efectos del alcohol.
La noticia sacudió la concentración de la selección. Organizaciones de víctimas de accidentes de tránsito pidieron la salida del jugador del equipo que disputaba la Copa América.
Pero Vidal sobrevivió. Sampaoli decidió mantenerlo en el equipo.
“Es más fácil excluir que incluir, sabemos todo lo que puede aportar, que no pudo controlar su descanso. Eso será un tema de corrección interna”, explicó el técnico.
Para muchos jugadores, esa crisis fue fundamental para el acoplamiento del equipo. En la jornada siguiente golearon 5-0 a Bolivia.
El capitán Claudio Bravo admitió que lo ocurrido con Vidal “unió al grupo” y que una demostración de ello fue el triunfo ante los bolivianos “en un partido que todo había salido bien e impecable”.
Después del gran Mundial de Francia de 1998, a Chile se le había olvidado cómo era clasificar a la Copa del Mundo: había quedado fuera de Corea – Japón 2002 y de Alemania 2006, pero, de la mano del argentino Marcelo Bielsa, logró retornar con una muy buena presentación a Sudáfrica 2010.
El heredero del método obsesivo del “Loco” fue Jorge Sampaoli, quien agarró a la selección chilena en diciembre de 2012 en reemplazo de Claudio Borghi y después de ganar la Copa Sudamericana con el club Universidad de Chile en 2011.
Desde entonces, Sampaoli, de 55 años, le imprimió su sello al equipo austral: marcaje intenso, ataque con velocidad, obsesión en los movimientos defensivos.
En el Mundial de Brasil estuvo a punto de eliminar al equipo anfitrión en los octavos de final (el palazo de Mauricio Pinilla a dos minutos del final), pero tuvo su revancha en esta Copa América.
“Me tengo que quitar el sombrero por estos muchachos: jugaron con valentía y con mucha clase contra un equipo que tiene calidad y buenos jugadores”, dijo el técnico al final del encuentro.
Cuando Argentina le metió seis goles a Paraguay en la semifinal, muchos pusieron a la albiceleste como la favorita para imponerse en la final ante Chile.
Pero Sampaoli confiaba en su equipo. “Esta final no hay que ganarla, hay que jugarla”, dijo a los medios un día antes del partido frente a Argentina.
Y así lo hizo: Chile nunca renunció al ataque, pero el técnico argentino decidió desconectar la sociedad Javier Pastore-Lionel Messi, que tan bien había funcionado contra Paraguay, prácticamente no existió en la tarde del sábado en Santiago.
La estrella del FC Barcelona lució aislado y sin nadie con quien generar juego en el medio campo.
Claro está que la estrategia del adiestrador de la “Roja” supuso un desgaste físico que llevó a Chile a renunciar al ataque en los últimos minutos del tiempo reglamentario.
Los jugadores entregaron todo.
Sin embargo, esa idea de juego fue fundamental para que Chile no dejara jugar a los argentinos, que nunca se encontraron en la cancha y llevó a la selección chilena a coronarse por primera vez campeón de América.