[contextly_sidebar id=”CylW0z1gO6gvAJhwQmzuPQq3vDJF07e2″]Valentina Maureira, la niña que le pidió a la presidenta chilena, Michelle Bachelet, que le ayudase a “dormir para siempre” falleció este jueves en el Hospital Clínico de Santiago a los 14 años.
Según informa la prensa local, la adolescente murió por complicaciones de la fibrosis quística que padecía desde los 8 años.
El caso de Valentina se conoció cuando le pidió a la presidenta Bachelet que autorizara la eutanasia, aunque poco después, la menor aseguró haber cambiado de opinión.
“Eres una gran luchadora,pero como tu dijiste “perdiste la batalla”. Gracias por cada momento de alegria y felicidad que me diste a mi y a muchas personas que compartimos contigo”, escribió su hermana Karime en su cuenta de Facebook.
La fibrosis quística afecta a múltiples órganos, especialmente a los pulmones, y genera periódicas infecciones que deterioran los tejidos.
Es una enfermedad genética incurable que causa la muerte a muchos menores, como el propio hermano de Valentina, que falleció a los 6 años de edad.
“Han sido 14 años de lucha, de día a día, y para mi familia ha sido más. Estoy cansada de seguir luchando, porque veo el mismo resultado siempre. Es muy cansador”, aseguró Valentina a través del teléfono desde el hospital, en conversación con BBC Mundo, en febrero de este año.
Después de que su petición, compartida por la red social YouTube, la propia Bachelet fue a visitar a la niña al hospital.
En Chile, como en la mayoría de los países del mundo, la eutanasia y el suicidio asistido están prohibidos.