[contextly_sidebar id=”3KeyYRrlFhbKB1sUeRLykmoQaf7WoFHw”]Desde hace más de tres meses, los habitantes de un suburbio de Saint Louis, en Missouri, han protestado por el asesinato de Michael Brown, un joven de 18 años de edad, quien fue asesinado por Darren Wilson, un policía de raza blanca.
Michael Brown y un amigo, ambos afroamericanos, se enfrentan a un policía cuando iban a casa de Brown luego de haber ido a una tienda. Brown y el policía, que es de raza blanca, pelean y la riña termina con una serie de disparos. Brown muere y su cuerpo permanece en la calle durante cuatro horas expuesto al calor del verano. Los vecinos arremeten contra las autoridades porque creen que el cuerpo ha sido maltratado.
La gente de Ferguson protesta de manera violenta, rompen los cristales de varios automóviles y saquean las tiendas del lugar. Se trata de la primera de varias noches marcadas por la violencia. Los saqueadores se llevan comida, papel higiénico y alcohol.
El FBI abre una investigación por la muerte de Brown. Dos hombres que dijeron ser testigos del tiroteo aseguran que Brown había levantado las manos cuando el policía se acercó con su arma y le disparó varias veces. Esa noche, la policía utiliza gases lacrimógenos y balas de goma para sofocar los disturbios y dispersar a la multitud que sale a protestar.
El jefe de policía de Ferguson, Thomas Jackson, prefiere no revelar el nombre del policía que le disparó a Brown. Dice que ha habido amenazas de muerte contra el departamento de policía y el Ayuntamiento de la ciudad.
La Patrulla de Carreteras de Missouri asume la seguridad de Ferguson. El cambio de mando se produce después de que se conocieran imágenes de las protestas que muestran a policías equipados con equipo propio de la milicia y que incluye vehículos blindados, chalecos antibalas y fusiles de asalto.
La policía identifica al oficial que le disparó a Brown. Se trata de Darren Wilson, de 28 años. También divulgan un video que pretende mostrar que Brown robó de una tienda unos 50 dólares en cigarrillos antes de ser asesinado, lo que provoca enojo entre los manifestantes.
El gobernador de Missouri, Jay Nixon, declara el estado de emergencia e impone un toque de queda en Ferguson.
El fiscal general de Estados Unidos, Eric Holder, ordena a un médico forense federal hacer una autopsia al cuerpo de Brown.
El gobernador Nixon envía a la Guardia Nacional a Ferguson para que ayude a restablecer el orden y levanta el toque de queda.
Holder visita Ferguson para ofrecer garantías con respecto a la investigación de la muerte de Brown, para reunirse con los investigadores y con la familia de Brown. En el poblado cercano de Clayton, un jurado de instrucción comienza a escuchar evidencia para determinar si el gobernador Wilson debe ser acusado, o no.
Nixon ordena a la Guardia Nacional retirarse paulatinamente de Ferguson.
Holder anuncia su renuncia pero dice que planea permanecer en el cargo hasta que se confirme su sucesor.
El jefe de policía de Ferguson, Tom Jackson, ofrece una disculpa a la familia de Brown mediante un vídeo grabado e intenta marchar con los manifestantes como acto de solidaridad, lo que es contraproducente porque la policía se enfrenta a ellos y detiene a una persona poco después de que Jackson se uniera al grupo.
Manifestantes de todo el país van a Saint Louis para un homenaje llamado “Ferguson October”, una serie de protestas que se realizaron durante cuatro días.
Nixon se compromete a crear la “Comisión Ferguson”, que será independiente y estará encargada de examinar las relaciones raciales del lugar, las escuelas fallidas y otras cuestiones sociales y económicas, como resultado de la muerte de Brown.
El gobernador declara el estado de emergencia y activa la Guardia Nacional de nuevo antes de que un jurado de instrucción tome su decisión de acusar al policía Wilson.
El Departamento de Policía del Condado de Saint Louis está a cargo de la seguridad de Ferguson, con la orden de trabajar como un comando unificado con la policía de Saint Louis y la Patrulla de Carreteras de Missouri.
Nixon nombra a 16 personas en la “Comisión Ferguson” de un grupo diverso de personas que incluye al dueño de una compañía de materiales de construcción, a dos pastores cristianos, dos abogados, un profesor universitario, un activista comunitario de 20 años y un detective de la policía. Nueve de sus miembros son de raza negra. Siete son blancos.
El Fiscal anuncia que el jurado de instrucción decide no procesar a Wilson. Durante las protestas que siguieron, al menos una docena de edificios y varios coches de policía resultan incinerados, oficiales de policía son golpeados con rocas y pilas. Al final, se reportan 80 personas detenidas.
AP.