Desmitifican en libro a personajes de Independencia de México (entrevista y capítulo de adelanto)
Si usted tiene ganas de tener una conversación a fondo sobre el inicio de la Independencia de México en este 204 aniversario que se recuerda este 15 y 16 de septiembre, el libro “Érase una vez México 2” de Sandra Molina y Alejandro Rosas es una buena opción para desmitificar este movimiento armado que comenzó en 1810.
De entrada, el libro menciona a otros personajes que también son importantes durante el desarrollo de la lucha.
“Juana Barragana que es una mujer que lucha a lado de Morelos o rescatamos al padre (Celedonio Domeco) Jarauta que se levanta en armas en contra de los gringos, durante la intervención”, explica el historiador Alejandro Rosas en entrevista con Animal Político.
Sandra Molina, autora de este libro, en entrevista también menciona que la Independencia de México debe ser vista como un movimiento criollo (de los hijos de españoles nacidos en Nueva España).
“Es un movimiento que empieza como una revolución social y termina siendo un movimiento criollo, como desde el principio estaba planeado”, comenta.
En esta obra, la historia de México es un proceso de cambios que se explican de la Independencia de México de 1810 a la Revolución Mexicana de 1910.
“Necesitamos los mexicanos saber la historia como un proceso, que no, nos queden estos agujeros negros de dudas de cómo empezó un proceso o cómo terminó el otro sino aprenderlo de manera lineal. Van a poder aprender historia sin los resentimientos heredados que aprendimos de la historia oficial contra los españoles, contra los norteamericanos. Está libre de juicios, no adjetivamos a los personajes”, reiteró Alejandro Rosas.
Por ello, en este libro no hay villanos favoritos y se detalla el papel de Agustín de Iturbide, quien consumó la Independencia de México en 1821.
“Es uno de los villanos favoritos desde una historia maniquea, desde una historia de buenos y malos que nosotros aprendimos en el siglo XX”, apunta Alejandro Rosas.
En ese sentido, Sandra Molina, resalta el papel que tuvo Agustín de Iturbide.
“Después de 10 años de guerra es el que logra que el Ejercito realista y los Insurgentes se unan en la misma causa de la Independencia. Con el paso de los años se transformó en un gran villano”, señala.
Además recuerda que Agustín de Iturbide decidió consumar la Independencia de México, debido a la fuerza que tenía Vicente Guerrero.
La consumación de la Independencia se produjo en 1821 a través de cartas con los insurgentes y nunca con el famoso abrazo de Acatempan que se muestra en las monografías de la escuela.
“Era un bárbaro, sabia moverse en su zona que era sur, lo que actualmente es el estado de Guerrero (…) Realmente esa parte de la Independencia que es el final era el único que andaba moviéndose. Iturbide por eso decide mejor hacer esta alianza con los Insurgentes y consumar la Independencia en el famoso abrazo de Acatempan que tampoco existió este abrazo”, narra Sandra Molina.
Y pese a que en la Ciudad de México se da el famoso Grito de Independencia que recuerda el inicio del movimiento armado, el Distrito Federal fue la zona con mínimas afectaciones por las batallas que se libraron.
“Si hay una guerra durante todos estos años, pero la gente sigue con su vida cotidiana porque no todas las Ciudades fueron afectadas y la Ciudad de México es de las que menos padeció durante la guerra de Independencia”, señaló.
Lee aquí el capítulo de adelanto:
