[contextly_sidebar id=”e5cdd9fa3561c320c6c7bd3f22af52a7″]Pese a que Michoacán y Tamaulipas tienen algunos de los peores indicadores de violencia, registran fuertes conflictos con grupos del crimen organizado y viven una crisis de inseguridad, aún hay uno de cada cuatro mexicanos que no saben de lo que sucede en estas entidades.
Tamaulipas y Michoacán se encuentran en la lista de estados donde existe un fuerte problema de inseguridad. De acuerdo con datos del Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal AC. 20 municipios tienen el mayor índice de violencia, cinco están en el Estado de México, tres en Guerrero, tres en Morelos, dos en Tamaulipas, dos en Coahuila, dos en Sinaloa y uno en Baja California. dicho índice se elabora con base en seis ilícitos: homicidio doloso, secuestro, violación, lesiones dolosas, robo con violencia y extorsión.
En mayo pasado, el gobierno federal definió una nueva estrategia para combatir a los grupos delictivos en Tamaulipas, quienes en su disputa por las plazas del estado han generado un ambiente hostil para los ciudadanos. Asimismo, Michoacán ha vivido ya más de un año de enfrentamientos entre autodefensas y grupos criminales, sumado a varios años de actividades ilícitas sin control de los cárteles.
En este contexto, Parametría realizó su nueva encuesta en vivienda a fines de mayo de 2014, buscando la opinión y el conocimiento a nivel nacional sobre estos eventos. Además, se muestra una comparación de los resultados de este ejercicio con el efectuado en noviembre de 2013, cuando se midió el fenómeno de la inseguridad en Michoacán, esto con el objetivo de comparar la percepción ciudadana en ambos casos.
Así, se observa que uno de cada cuatro mexicanos (24 %) no están enterados de la violencia que se viven en el estado de Tamaulipas. De forma similar, hace un poco más de medio -quizá en la cúspide del conflicto- año 23% dijeron desconocer de la situación de inseguridad en Michoacán.
De acuerdo con Gustavo Torres Salinas, Presidente Municipal de Tampico, la ola de violencia en Tamaulipas se desató a partir de un rompimiento interno del Cártel del Golfo, lo que dejó en abril de este año un saldo de 24 personas ejecutadas, sumándose decenas más en mayo. Ese mismo mes, el Gobierno Federal anunció una nueva estrategia de seguridad, la cual incluye desarticular las organizaciones delictivas, sellar las rutas de narcotráfico y garantizar instituciones de seguridad locales confiables y eficientes.
Las acciones del gobierno federal son respaldadas por 7 de cada 10 entrevistados: 41 % que afirma que son todos los niveles de gobierno quienes deben proporcionar seguridad a los tamaulipecos y 27 % dice que debe ser el gobierno federal quien brinde un ambiente seguro a dicho estado. Además, 23 % considera que el gobierno del estado es el principal responsable en el tema y únicamente 5 % señaló al gobierno municipal como quien debe garantizar este derecho.
Un cambio importante en la opinión pública entre la situación de inseguridad que se vive en Michoacán y la de Tamaulipas es que, en el primer caso, más personas (36 %) consideran que debe ser el gobierno federal quien proporcione seguridad al estado y menos personas apoyan que lo hagan los tres niveles (28%).
Casi ocho de cada diez entrevistados a nivel nacional, apoyan que tanto en Michoacán (76 %) como en Tamaulipas (78 %) el Ejército y la Policía Federal se hagan cargo de la seguridad en dichas entidades.
En tanto, 14% en el 2013 dijo que estaba en desacuerdo con que el gobierno federal hubiera enviado estos cuerpos de seguridad, mientras en Tamaulipas sólo 6% opinó igual. En general, existe aprobación por parte de los entrevistados de la estrategia de seguridad implementada por el gobierno federal, la cual consiste en hacerse cargo de la seguridad en algunos estados, otro dato que indicaría que el fenómeno no es visto como un problema local solamente.
Sin embargo, algo que podría resultar sorprendente es que casi 2 de cada 3 opinaba en noviembre pasado que las cosas seguirían igual (49%) o empeorarían (16%). Mientras tanto, sobre Tamaulipas, menos de la mitad está de acuerdo (45%), pues sólo 28% cree que las cosas seguirán igual y 17% cree que aumentará la violencia.
Por otra parte, sobre Michoacán hace medio año sólo 1 de cada 4 pensaba que las cosas mejorarían (26%), mientras que hoy para el caso de Tamaulipas casi la mitad lo creen (44%).