La familia del Estado de México que halló la noche del miércoles el material radiactivo robado el pasado martes, en el estado de Hidalgo, está fuera de peligro. Depués de que se les practicaran los exámenes correspondientes por haber estado cerca del material tóxico cobalto 60, que se utiliza generalmente en la industria médica, las autoridades municipales lograron establecer que las personas no corren riesgo.
Sin que informara el número de personas que conforman la familia que halló el material radiactivo, Francisco Santillán, alcalde de Hueypoxtla, Estado de México, aseguró que los miembros no sufrieron daños a la salud y que el cobalto permanece a resguardo en el baldío en el que fue abandonado.
El cobalto 60 es una especie radiactiva artificial del cobalto. A diferencia del que se se encuentra en la tabla periódica, el cobalto 60 no existe en la Tierra, sino que es producido por el hombre.
De acuerdo con la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (EPA), cuando un ser humano entra en contacto con el cobalto 60, desecha una parte a través de las heces fecales, pero el resto es absorbido por la sangre y los tejidos, especialmente el hígado, los riñones y los huesos.
Como toda radiación ionizante, la exposición a cobalto 60 puede causar cáncer o incrementa el riesgo de contraerlo.
La magnitud del riesgo de salud depende de la calidad del cobalto en cuestión, del tiempo de exposición, la distancia de la fuente radiactiva y si fue ingerido o inhalado. La mayoría de las intoxicaciones por este radioisótopo ocurre al comer alimentos contaminados o al respirarlo en el polvo del ambiente.
[contextly_sidebar id=”1ab79e1ad3057d80b6996401261c4bef”]La Comisión Nacional de Seguridad Nuclear y Salvaguardias (CNSNS) informó que la familia fue puesta en vigilancia puesto que encontraron el cabezal abierto sin la fuente y lo arrastraron hacia su casa.
El funcionario lanzó un mensaje de tranquilidad a la población de Hueypoxtla, Estado de México, donde fue encontrado el miércoles el camión y el material, formado por 60 gramos del isótopo cobalto 60 y considerado extremadamente peligroso.
“Esa fuente está en un lugar completamente lejos de la población (…) No hay ningún riesgo, que mantengan la calma, hay un operativo de seguridad para que nadie se acerque”, dijo el experto.
Sobre las personas que abrieron el cabezal del equipo y transportaron la fuente radioactiva, que aún se desconoce si fueron los mismos ladrones, Jiménez señaló que “con el tiempo que pasó ya deben empezar a sentir los efectos biológicos de la radiación”.
Organismo de Energía Atómica descarta riesgo
El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) descartó que exista algún peligro para los habitantes de la población mexicana donde fue hallado el material radiactivo que había sido robado el pasado 2 de diciembre.
A través de un comunicado, el organismo internacional destaca que aunque el contenedor en el que se transportaba el cobalto 60 fue manipulado, no hay señales de contaminación en pueblo de Hueypoxtla , Estado de México, donde fue hallado.
El OIEA explica que el material hallado, con una actividad de 3 000 curies ( 111 terabequerels ) , se considera categoría 1, lo cual implica que es extremadamente peligroso para la persona; por lo que si no se maneja de forma segura o protegida, sería probable que cause daño permanente a una persona que tenga contacto directo con él durante más de unos pocos minutos .
Agrega que las autoridades mexicanas están evaluando el potencial de exposición de radiación que pudieron tener las personas que manipularon el contenedor sin blindaje, aunque puntualizó que las personas expuestas a la fuente no representan un riesgo de contaminación para los demás. Los hospitales han sido alertados para buscar síntomas de dicha exposición .
Finalmente, la OIEA destacó que se mantiene en estrecho contacto con las autoridades mexicanas y consideró que las medidas adoptadas en respuesta al descubrimiento de la fuente son apropiados.