Estados Unidos y Rusia llegaron a un acuerdo sobre un marco para la eliminación de las armas químicas de Siria.
Ambos países dieron a Damasco un plazo de una semana para proporcionar un listado completo de su arsenal.
Durante una conferencia de prensa en Ginebra, el secretario de Estado estadounidense, John Kerry, señaló que el acuerdo marco de seis puntos incluye la obligación del gobierno sirio de ofrecer a los equipos internacionales libre acceso a todos los sitios.
Kerry añadió que los inspectores deben estar en el terreno en noviembre y que el objetivo final es destruir todas las armas químicas de Siria para mediados de 2014.
El ministro de Relaciones Exteriores ruso, Sergei Lavrov, dijo que el acuerdo había sido alcanzado con compromiso y profesionalismo.
Agregó que el acuerdo propuesto no hizo mención directa sobre el posible uso de la fuerza si Siria no cumple con los términos.
Sin embargo, éste podría ser implementado por una resolución de Naciones Unidas respaldado en la amenaza de sanciones o la fuerza militar.
[contextly_sidebar id=”df7fb487ffc1dcb716562ff38a1ae4a2″] “No hay lugar para juegos”
Estados Unidos asegura tener pruebas de que cientos de personas murieron en agosto en Siria en un ataque con armas químicas llevado a cabo por las fuerzas leales a Al Asad, algo que el gobierno sirio niega y responsabiliza a los rebeldes del presunto ataque.
Tras varios días de negociaciones con su par ruso, Kerry llamó al gobierno de Al Asad a cumplir con sus compromisos.
“No hay lugar para juegos. Sólo para que el régimen de Asad cumpla completamente con sus compromisos”, afirmó.
Ambos cancilleres aseguraron que si esto no sucede, se podría implementar una cláusula que permite a los miembros de las Naciones Unidas recurrir a la fuerza militar para obligar a la aplicación de un acuerdo.
El acuerdo de seis puntos que destacó el secretario de Estado estadounidense contempla que:
Reacciones
Para el corresponsal de la BBC en Washington Paul Adams, el calendario que plantea el acuerdo es “ambicioso”. “Y teniendo en cuenta cómo estábamos hace unos días, incluso hace tres días, es un acuerdo extraordinario”, dijo.
Las reacciones al resultado de las negociaciones entre Rusia y EE.UU. no se hicieron esperar. Francia, el único país que -junto a Washington- se mostró dispuesto a tomar acciones militares contra Siria, dio la bienvenida al acuerdo.
Su canciller, Laurent Fabius, lo definió como un “avance importante”.
Sin embargo, el líder militar del opositor Ejército de Liberación Sirio rechazó el acuerdo y prometió continuar con la lucha.
“No hay nada en este acuerdo que nos afecte”, afirmó el general Salim Idriss quien describió el convenio como una iniciativa rusa diseñada para que el gobierno sirio gane tiempo y pidió a Washington que no se deje embaucar por Moscú.
Por su parte, Kerry mostró su deseo de que el acuerdo ayudase a forjar un proceso de paz más amplio.
“Podríamos incluso establecer los trabajos preliminares para una mayor cooperación que es esencial para acabar con el derramamiento de sangre que está consumiendo a Siria desde hace más de dos años”, sostuvo.
“Lo que hemos acordado aquí hoy podría ser concebido como el primer paso concreto en esa dirección”.
Lavrov sugirió que podría realizarse otra conferencia internacional de paz sobre siria en octubre. Para él, “lo principal es asegurarse que todas las partes sirias están representadas en esa conferencia”.
Se cree que más de 100.000 personas han muerto en Siria desde que comenzase la revuelta contra el presidente Asad en 2011.
En estos años se han celebrado varias conferencias, en algunas de las cuales ha estado la oposición y se ha excluido al gobierno.
Además, millones de sirios se han visto obligados a huir de su país y otros tantos se han quedado sin hogar como consecuencia del conflicto.