[contextly_sidebar id=”ce6a90766aabc4ae4c7d91cc9b8cef82″]Reforma publica que el diputado federal Fernando Larrazabal orquestó entre 2009 y 2012, cuando era alcalde de Monterrey, un negocio inmobiliario para el cual echó mano de prestanombres que le provocó, incluso, un conflicto de intereses al impulsar el cambio de uso de suelo de un predio a nombre de su esposa para construir un edificio de departamentos en una zona de viviendas individuales, al sur de Monterrey.
De acuerdo con documentación en poder del diario, la operación inició el 25 de septiembre de 2009, casi tres meses después de la elección de Larrazabal como edil de dicho municipio.
Ese día, un colaborador de la campaña del panista, Héctor Rubén Moctezuma Aguilar, adquirió la propiedad en 2.4 millones de pesos.
El 4 de noviembre de 2010, el joven vendió la propiedad en 2.5 millones de pesos a la inmobiliaria Torre Satélite Acueducto, incluida una licencia de construcción tramitada dos meses antes.
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