El gobierno estadounidense aplicará sanciones económicas a ocho capos del narcotráfico acusados de trabajar para el poderoso y violento cártel de Sinaloa.
El Departamento del Tesoro dijo que siete de los capos manejan operaciones de contrabando de drogas para el cártel que presuntamente controla Joaquín “El Chapo”Guzmán en el estado mexicano de Sonora, lindante con Arizona. El octavo hombre es acusado de manejar las operaciones en Mexicali, ciudad limítrofe con California.
La Oficina de Control de Bienes Extranjeros del Departamento del Tesoro (OFAC, por sus siglas en inglés) los identificó como Cenobio Flores Pacheco alias Luis Fernando Castro Villa, Jesús Alfredo Salazar Ramírez, Ramón Ignacio Páez Soto y Guillermo Nieblas Nava alias Adelmo Niebla González.
La lista la completan Felipe De Jesús Sosa Canisales, Armando López Aispuro, José Javier Rascón Ramírez y Raúl Sabori Cisneros.
Según las autoridades, estos individuos respondían tanto a órdenes de los jefes de la organización, Joaquín “Chapo” Guzmán e Ismael “Mayo” Zambada, como de González Insunza Insunza, alias Macho Prieto, uno de los principales lugartenientes del cártel.
En enero pasado la OFAC incluyó en esta misma lista a Inés Coronel Aispuro, padre de Emma Coronel Aispuro, la tercera esposa de Guzmán Loera.
Las autoridades incluyeron también como “narcotraficante especialmente designado” a Damaso López Nuñez, alias El Licenciado, quien habría ayudado al “Chapo” a fugarse de una prisión de máxima seguridad en México en 2001.
Al declarar a estos hombres narcotraficantes bajo la ley Kingpin (capo), es ilegal para los ciudadanos estadounidenses tener negocios con ellos. Además, se congelan sus activos en Estados Unidos.
Guzmán, junto con varios de sus parientes y colaboradores, ya habían sido sancionados.
AP y Notimex