Niño de 5 años salva a hermanos menores de incendio
Un niño de 5 años de edad se convirtió en héroe al poner a salvo a sus dos hermanos que, al igual que él, se encontraban sin la compañía de sus padres en una vivienda que se incendió completamente.
El siniestro se registró la tarde de este miércoles en el domicilio marcado con el número 39 de las calles San Germán y Santa Trinidad, del fraccionamiento San Germán, ubicado al norponiente de esta capital, informó el subjefe del Departamento de Bomberos de Hermosillo, Francisco Ramírez Ibarra.
De acuerdo con las primeras investigaciones y peritajes, el fuego comenzó en una lámpara que se encontraba sobre un sillón del área de la sala.
El niño de 5 años, Jesús Alberto, se percató de que había fuego en el interior de su casa y logró sacar de la vivienda a sus dos pequeños hermanos: Juan Pablo, de 2 años y Pedro Damián, de 6 meses de edad.
Cuando los oficiales y unidades de bomberos de la estación norte llegaron al sitio del incendio, ya no había nada qué hacer. El fuego había consumido casi todo. Hasta parte del techo, toda vez que este estaba construido con material de frigolid, señaló Ramírez Ibarra.
Inmediatamente los bomberos platicaron con el mayor de los hermanitos, quien les narró que se encontraban solos, pues el papá había salido a comprar una pintura y la mamá había ido de compras al supermercado.
Aun así los llamados “tragahumo” entraron a la casa a realizar una búsqueda y poder confirmar que no había víctimas en el interior de la estructura siniestrada.
Los niños fueron llevados a la estación Cortijo de la Policía Municipal para después ponerlos a disposición del sistema estatal del DIF, pero los padres llegaron a reclamarlos.
Ramírez Ibarra exhortó a la población a no dejar a los menores solos en las viviendas, toda vez que esto representa un peligro. En esta ocasión, dijo, los menores se pusieron a salvo gracias a que uno de ellos observó oportunamente las llamas y de inmediato puso a salvo a sus hermanitos.
Sin embargo, no siempre se corre con la misma suerte y por eso ocurren las desgracias, añadió.
