Malala Yousafzai, la adolescente paquistaní que recibió un disparo en la cabeza a manos del Taliban, ha reanudado clases esta semana en el Reino Unido. La joven de 15 años no había asistido a la escuela desde el 9 de octubre del año pasado, cuando pistoleros talibanes la balearon mientras regresaba de la escuela en camión en el noroeste de Pakistán.
El Taliban luego confirmaría que la adolescente fue agredida por promover el laicismo y la educación de las niñas bajo las leyes severas del islam en la zona tribal del Valle de Swat.
Al borde de la muerte, la joven fue llevada al Reino Unido, donde fue atendida por cirujanos del Hospital Queen Elizabeth en Birmingham, en una operación de 5 horas que finalizó con la inserción de una placa de titanio sobre su cráneo destrozado. Malala fue dada de alta en enero y ayer comenzó clases en la preparatoria Edgbaston en Birmingham.
Según el medio estadounidense The Daily Beast, en la provincia de Malala en Pakistán, de los 700 mil niños que no reciben educación, 600 mil son niñas, a quienes se les seguirá negando el derecho a la educación, mientras no se les proporcionen los recursos y la seguridad para asistir a la escuela a salvo de dichas facciones fundamentalistas islámicas.
A principios de febrero, la activista de 15 años habló por primera vez en público tras el ataque que sufrió por parte del Talibán.
Aquí una entrevista con la joven en su primer día de clases, realizado por Daily Mail.
Con información de medios.