Gustavo Madero, dirigente nacional del PAN, reconoció que su partito político se desdibujó y se contaminó de todo aquello que en el pasado criticaban.
“En estos 12 años nuestro partido se convirtió en un satélite de los gobiernos emanados de nuestras filas y en el intento de participar en su ejercicio nos desdibujamos como institución contaminándonos de todo aquello que tanto criticamos y propiciando una triste alienación de nuestra identidad”, reconoció Madero al comenzar la sesión extraordinaria del Consejo Nacional.
El presidente nacional del PAN también admitió que durante su etapa como gobierno, Acción Nacional dejó de lado su vocación por la autonomía y permitió que se deteriorara su militancia con afiliaciones masivas, que devinieron en un clientelismo.
“Como consecuencia de estos factores y muchos otros, fuimos perdiendo el apoyo de ciudadanos que dejaron de encontrar en nosotros un camino de esperanza y empatía”, reconoció.
Ante la crisis que enfrenta el PAN, Madero dijo que hoy empiezan un nuevo ciclo que les exige estar a la altura de la sociedad, como un partido maduro, que aprende de sus errores.
En ese4 sentido llamó a los consejeros nacionales a analizar con honestidad y nobleza el proyecto de reforma estatutaria, pensando en lo mejor para la institución y no en cómo defender intereses o privilegios particulares.
Madero convocó a los integrantes del colegiado a que reciban esta propuesta no como una consigna, ya sea para torpedearla o aprobarla críticamente, sino como una verdadera oportunidad histórica para fortalecer y mejorar al PAN.