El primer día de Elba Esther Gordillo en prisión empezó desde las primeras horas de este miércoles y es que justo durante la primera hora de su estancia, ella estaba siendo sometida a una revisión médica por dos motivos: una porque así lo marca el reglamento de Santa Martha Acatitla, y dos, porque al momento de su ingreso se sintió mal.
De acuerdo a los funcionarios consultados esto provocó que la primera revisión médica sólo fuera de manera general, puesto que al menos en dos ocasiones “La Maestra” sufrió crisis nerviosas y comenzó a sentirse mal, tanto que solicitó la presencia de su médico particular, pues le indicó al personal médico que no podía tomar cualquier tipo de medicamento.
Esto provocó que los exámenes que por ley se aplican en materia médica psiquiátrica y psicológica quedaran pendientes.
Hacia las tres de la mañana, las autoridades del reclusorio le informaron que se le abriría un expediente personal para lo cual pasó con una trabajadora social quien le indicó que el expediente debía tener datos sobre su detención y consignación.
Para ello le realizaron una entrevista con datos generales y le informaron que su expediente debía constar de datos jurídicos, laborales, educativos, de trabajo social y, posteriormente, de su comportamiento dentro del penal.
Tras pasar los requisitos para su ingreso, Elba Esther Gordillo fue trasladada, según lo informó el área de reclusorios del GDF, a Observación y Clasificación, pese a que el reglamento señala que los de recién ingreso deben estar en el área de ingreso que cuenta con menor número de internos y que en su mayoría no se les ha resuelto su situación jurídica.
Fue ahí en el área de observación que a “La Maestra” se le proporcionó un cubículo individual donde permaneció durante el resto de la madrugada y parte de la mañana.
Fue a las ocho de la mañana que personal del penal le ofreció el desayuno que se les da a las internas, sin embargo la líder magisterial señaló que ella no podía comer cualquier tipo de comida pues padece de insuficiencia renal y tuvo hepatitis C.
Ante ello pidió algunas frutas, de las cuales sus médicos le han dicho puede comer, al tiempo que le notificaron que sería trasladada al reclusorio oriente para su declaración preparatoria.
Fue hacia el mediodía que personal del penal de Santa Martha la trasladó a las instalaciones del juzgado sexto de distrito con sede en el Reclusorio oriente, lugar al que llegó vestida con una blusa blanca de mangas cortas y cuello de tortuga, como artículos personales sólo le permitieron llevar consigo unos lentes.
Durante la audiencia, Elba Esther ponía atención a las acusaciones que se hacían en su contra al tiempo que buscaba a cada instante la mirada de su hija y trataba de reconocer y conocer a sus abogados.
En el juzgado explicó y detalló los problemas de salud que tiene y la necesidad que tendrá en breve de operarse.
Terminada la audiencia, Elba Esther fue trasladada de nueva cuenta al penal de Santa Martha, donde le informaron que permanecería ahora en la denominada “estancia de ingreso” lugar en el que permanecerá hasta en tanto sea resuelta su situación jurídica.
Ahí, y por el momento, se le ofreció un cubículo individual para poder dormir, en tanto que las autoridades del reclusorio le informaron que podría tener acceso a servicios médicos.
Por el momento, Elba Esther no podrá convivir ni tener acceso a la población común de Santa Martha Acatitla, sólo podrá tener contacto con aquellas mujeres que están en su misma área y que también están esperando se resuelva su situación jurídica.