Las instituciones de seguridad y justicia en Gómez Palacio y Lerdo se encuentran desmanteladas, sin cuerpos policiacos para prevenir delitos, agencias del Ministerio Público para recibir denuncias y un centro penitenciario para castigar delincuentes.
En el último mes, tras el cierre del Centro de Readaptación Social y los ataques contra la Vicefiscalía para La Laguna de Durango, la estructura de seguridad pública y procuración de justicia en la región ha sido debilitada y la crisis se agravó en la última semana.
El desarme de los policías municipales de ambos municipios por parte del Ejército y la detención de un centenar de agentes por presuntas ligas con el crimen organizado provocaron que Gómez Palacio y Lerdo se quedaran sin un cuerpo de seguridad preventivo.
Los patrullajes del Ejército y la Policía Federal se han intensificado, pero no abarcan toda la zona y los robos aumentaron en los últimos días en ambos municipios, sobre todo en bancos y comercios.
El número de emergencias 066 está bajo el control del Ejército, pero víctimas de robos o agresiones dijeron a El Siglo de Torreón que los militares sólo atienden reportes relacionados con grupos del crimen organizado.
VICEFISCALÍA, PARALIZADA
Ante el aumento en los delitos, la recepción de denuncias en la Vicefiscalía para La Laguna de Durango está paralizada luego de constantes ataques contra el edificio sede en el último mes y el homicidio de algunos funcionarios.
La mayoría de las víctimas de delitos prefieren ya no ir a presentar denuncias debido a la inseguridad en la sede de la Vicefiscalía y los que sí acuden se topan con un reducido personal para atenderlos.
Sólo dos peritos laboran en el área de Servicios Periciales para recoger evidencias. Víctimas se han quejado de que los peritos les exigen costear los traslados para hacer diligencias y tomar sus propias fotografías de daños o lesiones para las denuncias.
Las mesas receptoras de denuncias en las agencias del Ministerio Público están sin personal de atención.
El delito más común en Gómez Palacio y Lerdo es el robo de vehículos, pero la agencias del Ministerio Público no tienen la capacidad para atender los casos, pues las 15 secretarias que atienden las mesas tienen más de un mes de “permiso especial”, de acuerdo con fuentes de la Vicefiscalía.
Para todas las mesas investigadoras hay sólo cinco agentes del MP, que se reparten una carga de trabajo que el año pasado promedió más de 300 denuncias al mes.
La Vicefiscalía tenía 14 agentes del Ministerio Público el año pasado, pero la mayoría han solicitado permiso o incapacidad y llevan más de un mes sin trabajar.
Además, tras la clausura del Cereso de Gómez Palacio, la Fiscalía del Estado debe trasladar a cualquier detenido a la ciudad de Durango para que allá se le inicie proceso.
Hasta ahora no se ha definido si La Laguna de Durango volverá a tener infraestructura penitenciaria para reos del fuero común.
El Siglo de Durango