Hoy, por primera vez en 50 años, entra en vigor la ley migratoria en Cuba que permitirá a la gran mayoría de los cubanos viajar al exterior sin tener que pedir permisos especiales o hacer trámites engorrosos.
A partir del 14 de enero, los cubanos podrán viajar al exterior sólo con su pasaporte en regla y con el visado que exija el país de destino.
Las reformas en la ley migratoria que rige desde hace varias décadas fueron anunciadas hace tres meses y son posiblemente los más aguardados de una serie de cambios iniciados con el presidente Raúl Castro.
La legislación elimina la visa de salida llamada “tarjeta blanca” que Cuba obligó a solicitar a sus habitantes por largo tiempo antes de que pudieran viajar, algo que llevó a los opositores a referirse al país comunista como una “isla prisión”.
La ley podría tener un gran impacto en la política estadounidense, que permite a todo cubano que pisa suelo de Estados Unidos conseguir la residencia luego de un año. Los cubanos pueden permanecer fuera de la isla por dos años, lo que implica que tendrán un margen de 12 meses para sacar la residencia en Estados Unidos y se abre la posibilidad de que surja una nueva clase de binacionales que entren y salgan sin problemas de ambos países.
La reforma migratoria cubana da también algunos pasos para permitir incluso la “entrada temporal” de emigrados que el Gobierno cubano consideró “ilegales”, incluidos médicos y deportistas que desertaron o abandonaron el país en los años noventa.
Con información de ABC y AP.
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