El ex primer ministro italiano Silvio Berlusconi elogió el domingo a Benito Mussolini, quien a su juicio “hizo cosas buenas” a pesar de las leyes antisemitas que promulgó el dictador fascista.
Las palabras de Berlusconi desataron muestras de indignación en Europa el domingo, día en que se recuerda a los millones de judíos muertos durante la Segunda Guerra Mundial.
Berlusconi defendió también a Mussolini por aliarse con Hitler, al considerar que el entonces líder italiano dedujo quizás que lo mejor sería unirse al bando que tenía más probabilidades de ganar la guerra.
El magnate de los medios informativos, cuya fuerza política conservadora se ubica segunda en los sondeos sobre preferencias electorales de cara a los comicios del mes próximo, habló con la prensa en las márgenes de una ceremonia para recordar el Holocausto en Milán.
En 1938, antes de que estallara la Segunda Guerra Mundial, el régimen de Mussolini aprobó las llamadas “leyes raciales” que imponían diversas prohibiciones a los judíos, incluida la de asistir a las universidades italianas y la de ejercer varias profesiones. Durante la guerra, cuando el régimen nazi ocupó Italia, miles de integrantes de la pequeña comunidad judía en el país fueron deportados a campos de exterminio.
“Es difícil ponerse ahora en los zapatos de quienes tomaron las decisiones entonces”, dijo Berlusconi sobre el apoyo dado por Mussolini a Hitler. “Ciertamente, el gobierno entonces temía que el poder alemán derivaría en una victoria generalizada, y prefirió estar aliado con la Alemania de Hitler que oponerse a ésta”.
Berlusconi añadió que, “dentro de esta alianza, vino la imposición de la lucha contra los judíos y de su exterminio. Por lo tanto, las leyes raciales son el peor error de Mussolini, quien en muchos otros aspectos hizo cosas buenas”.
Más de 7 mil judíos fueron deportados bajo el régimen de Mussolini. De ellos, 6 mil fueron exterminados.
Las reacciones de indignación contra Berlusconi no se hicieron esperar. Incluso hubo quienes exigieron que el ex primer ministro sea procesado por promover el fascismo.
Los elogios de Berlusconi a Mussolini constituyen “un insulto a la conciencia democrática de Italia”, consideró Rosy Bindi, una dirigente de centro-izquierda. “Sólo el cinismo político de Berlusconi, combinado con el peor revisionismo histórico, podían desvincular a la dictadura fascista de la vergüenza de las leyes racistas”.
Berlusconi se ha postulado para las elecciones parlamentarias del 24 y 25 de febrero, aunque no ha tomado una decisión definitiva sobre si buscará un cuarto periodo como primer ministro.
AP