En San Luis Río Colorado, Sonora, dos jóvenes integrantes de un supuesto grupo anarquista fueron detenidos por la Policía Estatal por su presunta responsabilidad en el incendio de las instalaciones del Comité Directivo Municipal del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
Se trata de Luis Antonio López de 19 años y Wendy Cazares de 18 años, esta última hermana de una joven que forma parte del Movimiento Yo Soy 132 en el norteño municipio fronterizo, informó Alejandra González Navarro, Secretaria General del Comité Directivo Municipal del PRI.
Los hechos se registraron el domingo 2 de diciembre, alrededor de las 3:00 de la mañana. Los primeros reportes policiales señalan que los responsables arrojaron bombas molotov a las instalaciones del PRI.
Fue un grupo de vecinos del inmueble, localizado en una transitada zona de la ciudad, quienes reportaron el incendio y los que identificaron a los jóvenes detenidos como los presuntos responsables de arrojar las bombas.
Muy cerca del edificio del PRI, en la parte trasera de un negocio, la policía encontró más bombas molotov sin utilizar.
Anarquistas se adjudican ataque
En las inmediaciones del inmueble incendiado fueron colocadas varias carteleras con el rostro del presidente Enrique Peña Nieto y las leyendas: “Peña no” y “Peña pendejo”, así como una lona que decía “Movimiento Anarquista Revolucionario Sanluisino (MARS)”.
Se trata de un supuesto grupo anarquista que el sábado 1 de diciembre, es decir unas cuantas horas antes del ataque, abrió una página en Facebook donde anunció que ese mismo día iniciarían operaciones en San Luis Río Colorado.
Textualmente escribieron: “MARS se hace responsable de toda actividad y acto de protesta que se realice en esta madrugada en SLRC”.
No sólo eso. En un segundo mensaje escrito ayer, reconocieron que fueron ellos los que atacaron las instalaciones del PRI.
Hasta la tarde del domingo, la Dirección de Bomberos municipal realizaba los peritajes correspondientes para determinar la causa del incendio y cuantificar los daños, que según Alejandra González se centraba en mesas, sillas, documentos internos, ventanales, refrigeraciones y computadoras.
En un breve comunicado, el Consejo Ejecutivo Nacional del PRI condenó el ataque a las instalaciones municipales de su partido y convocaron a evitar “provocaciones y acciones violentas de cualquier grupo”.
PRI de SLRC endeudado
El ataque a las instalaciones del PRI en San Luis Río Colorado se da en medio de un escándalo al interior del partido por el desvío de 6.1 millones de pesos, por las cuotas que los ex funcionarios priistas a nivel local, encabezado por el ex alcalde Manuel Baldenebro, debieron haber entregado a su dirigencia.
Lo anterior ha generado que el PRI sanluisino se encuentra prácticamente en la bancarrota, al grado que hasta antes del ataque no tenían recursos para pagar la luz del edificio incendiado, la cual estaba cortada.
En su momento, el ex alcalde Manuel Baldenebro, reconocido internacionalmente como el “Mataperros” luego de haber ordenado la matanza de miles de perros a cambio de beneficios en el pago del agua, dijo que los 6.1 millones fueron utilizados para gastos de campaña, aun cuando los líderes del PRI no tienen idea exacta de lo qué ocurrió con el destino final de esos recursos.
“En efecto tenemos un problema con las cuotas partidistas que nunca llegaron al Comité Municipal”, reconoció Alejandra González, quien expuso que al saber del incendio los dirigentes del partido a nivel estatal se comunicaron con ellos.
“Sabedores de la situación económica en la que nos encontramos, se comprometieron para apoyarnos en todo”, comentó la Secretaria General del PRI sanluisino, cuya dirigencia investigaba internamente el desvío de esos recursos.