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Marley, retrato de un mito
Marley, retrato de un mito
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Marley, retrato de un mito

22 de diciembre, 2012
Por: blogeditor

 

Por Gustavo E. Ramírez Carrasco (@gustavorami_)

Muchos de nosotros, miembros de una generación posterior al establecimiento de la música pop, escuchamos a los Beatles, los Rolling Stones o los Bee Gees en las tornamesas y las radiograbadoras de nuestros padres. Las estaciones retro de radio, concebidas para audiencias encapsuladas en la nostalgia de los años dorados del rock, mantuvieron muy viva la imagen sonora de una era de rebeldía que llevó a un gran número de artistas (sobre todo anglosajones) a convertirse en símbolos internacionales de ruptura con la modernidad. Bob Marley, muy seguramente el jamaiquino más famoso de la historia –no sólo del rock–, es uno de los casos más connotados de la explosión de mitos mediáticos generados en los últimos años del treceavo Baktún (para ponernos mayas en tiempos del fin del mundo).

Hace más o menos dos años, dos después de haber estrenado Shine a Light (2008) en salas IMAX de Estados Unidos y Europa, Martin Scorsese anunció la realización de un documental sobre el legendario líder de The Wailers, la banda jamaiquina que puso a las orejas del mundo occidental sobre el pequeño país antillano. El proyecto se sumaría a otros documentales biográficos sobre figuras emblemáticas del rock como Bob Dylan (No Direction Home, 2005) y George Harrison (George Harrison: Living in the Material World, 2011), películas que recorrían la carrera de los músicos desde sus inicios. El proyecto, sin embargo, nunca fue realizado por el director de La última tentación de Cristo que, “por razones de agenda” (mejor me voy a hacer cosas que dejen más dinero), lo dejó de lado. Fue, no obstante, retomando por Kevin MacDonald, un cineasta escocés más joven, conocido en años recientes por haber realizado documentales como Touching the Void (2004)y Life in a Day (2011), además de dos buenas películas de ficción del “género histórico”: El último rey de Escocia (2006) y El águila de la legión perdida (2011).

Marley Cinesapiens

Marley, el resultado de la incursión de MacDonald en el cine rockumental, es una película notable de dos horas y media de duración, en la que la figura del principal exponente de la historia del reggae es homenajeada en su totalidad. De su génesis como músico en la bulliciosa y semirural ciudad de Kingston a principios de los sesenta, hasta su muerte prematura en 1981, la vida de Bob Marley es recorrida con ayuda de extraordinarios materiales de archivo, muchos de ellos inéditos: fotografías familiares de su infancia y adolescencia, películas en 8 o 16 mm. de las giras de The Wailers por Europa y Estados Unidos y un sinnúmero de notas periodísticas e imágenes televisivas que constatan su monumental éxito –casi a niveles de culto religioso– desde mediados de los setenta.

Decenas de entrevistas con familiares, colegas y amigos cercanos dan testimonio de la evolución artística de Marley, siempre marcada por influencias musicales precedidas de cambios políticos profundos  (como  la independencia de Jamaica),  en una época de transformaciones sustanciales en la que la que, a diferencia de años recientes, las certidumbres ideológicas también formaban parte de la escena creativa más popular.

El acercamiento de Marley al movimiento rastafari y su papel fundamental en su posterior expansión se amalgama en la obra total del cantante jamaiquino. Consiente de ello y deseoso de explotar el argumento en esa dirección, MacDonald emplea la búsqueda religiosa del músico como hilo conductor del retrato, ya sea filtrada a través de una edición impecable de las imágenes (a cargo de Dan Glendenning, editor de series y documentales de televisión –se nota muchísimo–), o adherida a la potente dosis de ritmos caribeños apareados con rock, que además de los más grandes éxitos de Bob Marley y TheWailers, componen la banda sonora de la película.

Si Marley, como leía hace unos días en la crítica de un colega, puede verse como una apología un tanto desmedida a la figura del rockstar rasta (lo es, sin duda), representa bien, por otro lado, la visión que millones de fans alrededor del mundo (incluido el director, obviamente) tienen sobre el autor de éxitos generacionales como One Love y No Woman No Cry, canciones que todos, fans y no fans, hemos escuchado alguna vez, escupidas desde una vieja radio de local comercial o entonadas por músicos de camión.  La película de MacDonald es un mapa eufórico del culto a un músico, y al menos de mi perspectiva personal funciona, y funciona muy bien.

 

Parte de la 54 Muestra Internacional de la Cineteca Nacional, Marley es además uno de nuestros estrenos de diciembre. Para revisar fechas y horarios de exhibición, ingresa a nuestra página.

 

*Gustavo E. Ramírez Carrasco (@gustavorami_) es antropólogo, trabaja en distintos proyectos de la Cineteca Nacional, entre los que destaca Icónica.

 

 

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Etiquetas:
Bob Marley
Cine
documental
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Imagen BBC