Y después del IFE … ¿qué sigue?
Una vez terminado el proceso que tocaba realizar al Instituto Federal Electoral (IFE), sigue en curso otro segmento de los comicios que implican al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) a quien le toca finalizar el proceso de impugnación y calificación de la elección.
El académico y especialista en legislación electoral, Ciro Murayama (@CiroMurayama), afirmó en el programa Expediente Animal, en Reactor 105.7 FM, que los cuatro candidatos presidenciales, así como los partidos que los respaldan, entregarán hasta el 30 de octubre sus cuentas de la campaña, a pesar de que algunos de ellos están pidiendo ya la resolución del tea de financiamiento al IFE.
Murayama agregó que antes de la elección sólo había dos denuncias en el IFE por coacción del voto, mientras que será hasta enero de 2013 cuando los partidos entreguen sus cuentas de campaña al Instituto para su revisión que se finalice el proceso de fiscalización.
El analista afirmó que la petición de los partidos políticos al IFE para que termine la fiscalización previo al 6 de septiembre cuando se califica la elección y se da la constancia de mayoría al candidato equivale a pedirle al IFE que viole o cambie la ley, cuando esto está fuera de sus facultades. “Quieren que en quince días el Instituto tenga un dictamen de una información que ni siquiera le han dado ni le van a dar.”
Murayama explicó que los partidos deben acreditar en estos días y hasta antes del jueves la compra de votos frente al TEPJF, acreditar que esto sucedió durante la jornada electoral, mientras que el proceso de fiscalización finalizará hasta enero.
Habiendo terminado el recuento de actas y boletas por parte del IFE, el lunes inició la actividad y el análisis de las inconformidades por parte del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), como lo indica la normatividad electoral, concentrada en el Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales.
En la organización y validación de elecciones a nivel federal, las atribuciones administrativas le corresponden al Instituto Federal Electoral (IFE), como organismo público autónomo e independiente, y las atribuciones jurisdiccionales corresponden al Tribunal Electoral, órgano especializado del Poder Judicial con atribuciones para resolver en última instancia las controversias electorales.
El TEPJF atiende entre el 9 y el 12 de julio las impugnaciones y controversias presentadas por los partidos, analizará el proceso electoral hasta el 31 de julio, mientras que, a más tardar el 6 de septiembre, declarará la validez de la presidencial y dará la constancia de mayoría al presidente electo.
Hasta el momento, se ha realizado ya el cómputo distrital por parte del IFE, mientras que el consejero presidente del IFE ha declarado que los comicios se realizaron dentro de la ley, a pesar de que el PAN y la Coalición Movimiento Progresista han denunciado un rebase de topes de campaña por parte del PRI, una elección inequitativa por el apoyo de medios electrónicos y encuestadoras hacia Peña Nieto y compra de votos.
Estas elecciones federales constituyen la octava ocasión que el IFE interviene en unos comicios desde su creación. La última acción del IFE en estas elecciones fue determinar la cantidad de curules de representación proporcional que corresponden a cada partido en la próxima Legislatura, la cual se debe instalar el 1° de septiembre. Sin embargo, el IFE seguirá desempeñando funciones relativas al propio proceso electoral, pues aún hay muchas quejas presentadas que están por resolverse, así como pruebas en materia de fiscalización.
Por su parte, el TEPJF aún realizará el cómputo final, resolverá todas las quejas e impugnaciones de forma inatacable y determinará si la elección es válida o no, para después otorgar la constancia de presidente electo antes del 6 de septiembre.
“La etapa de dictamen y declaraciones de validez de la elección y de Presidente electo de los Estados Unidos Mexicanos, se inicia al resolverse el último de los medios de impugnación que se hubiesen interpuesto en contra de esta elección o cuando se tenga constancia de que no se presentó ninguno y concluye al aprobar la Sala Superior del Tribunal Electoral, el dictamen que contenga el cómputo final y las declaraciones de validez de la elección y de Presidente electo”, establece el artículo 210 del Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales (Cofipe).
Una vez recibidas las quejas, el pleno del Tribunal, integrado por siete magistrados, sesionará para resolver cada una de las impugnaciones presentadas; en el caso del Senado y la Cámara de Diputados los juicios deberán resolverse antes del 3 de agosto.
Respecto a los juicios de inconformidad relativos a los cómputos distritales de la elección de Presidente de los Estados Unidos Mexicanos, el TEPJF tendrá como fecha límite para resolverlos el próximo 31 de agosto.
Posteriormente, luego de haber resuelto las impugnaciones y siempre y cuando las resoluciones del Tribunal Electoral no tengan como efecto la nulidad de la elección, se efectuará el cómputo final. Una vez emitidas las declaratorias formuladas por la Sala Superior, se notificará a la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados para que ésta expida y publique de inmediato el Bando Solemne.
Finalmente, el Presidente electo deberá acudir a la sede del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación para que le sea entregada su constancia de mayoría, firmada por los siete magistrados del organismo que preside el magistrado Jorge Alejandro Luna Ramos.
Este documento lo acreditará como ganador de los comicios presidenciales del 1 de julio y le permitirá tomar posesión ante el Congreso de la Unión como Presidente de México el próximo 1 de diciembre.
