El presidente Felipe Calderón firmó un convenio para el intercambio de servicios de salud en Baja California Sur, lo que significa que los derechohabientes del IMSS, ISSSTE o Seguro Popular podrán utilizar cualquiera de las instalaciones sin importar su afiliación.
Esto representa que los derechohabientes ya no tendrán que “trasladarse a otro estado ni asumir costos por recibir la atención requerida, ya que serán absorbidos por las instituciones de salud”.
En un comunicado de prensa, Presidencia informó que este convenio es el primer paso hacia un sistema universidad en servicios públicos de salud.
En entrevista con Salvador Camarena en W Radio, el secretario de Salud, Salomón Chertorivski, dijo que este convenio funcionará, por el momento, sólo en Baja California Sur, y además, en servicios de “segundo nivel”, que son “los servicios de atención ambulatoria especializada y de hospitalización a pacientes derivados del primer nivel o de los que se presentan de modo espontáneo con urgencias médico-quirúrgicas, cuya resolución demanda la conjunción de técnicas y servicios de mediana complejidad a cargo de personal especializado. Comprende, además, acciones de vigilancia epidemiológica en apoyo a las realizadas en el primer nivel”.
Y los servicios de primer nivel son “las acciones y servicios enfocados básicamente a preservar la salud mediante actividades de promoción, vigilancia epidemiológica, saneamiento básico y protección específica, así como diagnóstico precoz, tratamiento oportuno y rehabilitación, en su caso, de padecimientos que se presentan con frecuencia y cuya resolución es factible por medio de atención ambulatoria basada en una combinación de recursos de poca complejidad técnica”.