México podría estar frente a un daño psicosocial causado por la violencia y sus efectos, es una de las conclusiones a la que llegaron los integrantes del colectivo “México Con Paz”, quienes recientemente aplicaron una encuesta nacional para conocer los niveles de traumatismo y estrés existentes en la población mexicana.
Siete de cada 10 encuestados reconocieron fricciones en su vida social a consecuencia de la “guerra contra el narcotráfico”, mientras seis de cada 10 dijeron tener afectaciones económicas y familiares por esa misma causa.
La idea de realizar la encuesta, a decir de José Calderón, médico psiquiatra especializado en motivación, trauma, adicciones y medicina, es impulsar una propuesta nacional para reducir el estrés, trauma y fomentar la salud, el bienestar y paz en México, empleando Medicina Mente-Cuerpo.
Miembro del colectivo México Con Paz, grupo conformado por académicos y profesionales dedicados a la promoción de iniciativas de paz, Calderón es de los que piensa que un proyecto integral de paz debe incluir la promoción de la salud y bienestar a través de medidas para ayudar a individuos y comunidades a sanar las enfermedades y dolencias comunes que causa la violencia, como pueden ser los traumatismos, la incertidumbre y el miedo.
Un dato que arrojó la encuesta y que ayuda a dimensionar el problema de salud mental por el que atraviesa México, fue el hecho que uno de cada tres padres de familia reconocieran que a consecuencia de la escalada de violencia sus hijos reportan síntomas como dolores de cabeza, estomacales, cansancio y problemas para dormir, comunes en personas con estrés.
Tres de cada cuatro entrevistados dijeron sentirse “peor” cuando escuchan noticias, mientras que el 51% expresó que de poder hacerlo si irían del país.
Producto de la encuesta aplicada entre octubre de 2011 y febrero de 2012 a profesionistas, empleados y periodistas –gremio al que calificaron como de “alto riesgo” por estar más expuestos al problema-, los integrantes del colectivo propusieron una serie de acciones psicosociales para la salud mental de los mexicanos, con el fin de tratar de incidir en la política pública de atención a la salud.
Se trata de 12 propuestas, divididas en tres temas –diagnóstico y necesidades; ampliación de tipo y cobertura de servicios; medios de comunicación- que de acuerdo con México Con Paz podría ayudar a manejar el estrés, el trauma y permitiría fomentar el bienestar psicosocial de los mexicanos.
Animal Político te presenta las 12 propuestas hechas por el colectivo México Con Paz.
I. Diagnóstico y necesidades
1. Llevar a cabo una encuesta nacional para evaluar el estado psicológico y las necesidades de los mexicanos tomando en cuenta diversas variables: género, edad, nivel de educación e ingreso, región, exposición a la violencia, grupos desplazados o emigrantes, huérfanos, condiciones pre-exposición como historia de trauma previa, enfermedades medicas y psiquiátricas, adicciones, y grado de exposición a los medios de comunicación, el acceso a los servicios de salud, e infraestructura sanitaria y de recreación.
2. El estudiar específicamente y atender las necesidades de los niños. Los niños son uno de los grupos más vulnerables al trauma y la violencia y serán los adultos que mañana adopten o no, conductas de salud y pro-sociales. Incorporar en los tres ámbitos (clínicas de atención primaria, clínicas de salud mental, escuelas, centros comunitarios) modelos sencillos para prevenir o mitigar trauma en niños. Estas pueden ser implementadas por profesionales y trabajadores comunitarios de salud.
3. Evaluar los obstáculos existentes para la promoción de la salud, tratamiento y el bienestar. Estos obstáculos pueden incluir: dificultades y barreras de acceso a servicios de salud, la falta de formación y educación en técnicas sencillas de tratamiento psicosocial, la ausencia de profesionales de la salud, el uso de estrategias psicosociales obsoletas o ineficientes, los medios de comunicación propagandísticos y re-traumatizantes, las creencias culturales, y la falta de protocolos efectivos para atender victimas de trauma. Desarrollar un plan de acción para reducir las barreras de atención.
II. Ampliación de tipo y cobertura de servicios
4. Formación y capacitación del personal de salud, trabajadores comunitarios de salud y para-profesionales de salud en el uso de métodos de detección simples de depresión, estrés, ansiedad, adicciones y trauma, junto con técnicas sencillas de primeros auxilios psicológicos que incluye técnicas de medicina mente cuerpo, cognitivo conductuales y de motivación. El uso de “trabajadores comunitarios de salud” puede contribuir a la difusión de técnicas de reducción de estrés, detección y manejo sencillo de depresión o ansiedad, así como en la difusión de mensajes de paz y reconciliación.
5. Adaptar e incorporar modelos de salud existentes que ofrecen exámenes simples de salud mental, tratamiento básico y el uso de técnicas de motivación de conducta, grupos de reducción de estrés mente-cuerpo y modelos sencillos cognitivo-conductuales fuera y dentro del sistema de salud mental, por ejemplo, en las clínicas de atención primaria, escuelas, lugares de trabajo, cuerpos de seguridad, lugares de trabajo, el sistema judicial y penitenciario.
6. Utilizar medios sociales electrónicos como vehículos del mensaje de cuidado personal así como de técnicas sencillas mente-cuerpo y cognitivo-conductuales, y para informar sobre servicios existentes cerca de uno. Por ejemplo: “mandar un tweet diario a un familiar o amigo o ciertos grupos de riesgo”.
7. Incorporar técnicas mente-cuerpo de reducción de estrés, técnicas de entrevista motivacional y técnicas sencillas cognitivo-conductuales en el currículo educativo de los médicos y enfermeras en formación y otros proveedores de salud, maestros, y personal de seguridad.
8. Crear capacidad nacional local para ofrecer grupos de medicina mente cuerpo y entrenar una fuerza local para dar liderazgo, y proveer dichos servicios.
III. Medios de Comunicación
9. El empleo de medios de comunicación y medios electrónicos para crear y reforzar una cultura de cuidado personal y comunitario basado en reducción de estrés, el uso de dieta y ejercicio y sus efectos directos sobre el cerebro, el estrés y las enfermedades crónicas. El programa fortalecerá los actuales esfuerzos por fomentar el juego y el ritual en escuelas, la actividad física y mejorar los hábitos alimenticios.
10. Utilizar los medios de comunicación como vehículos para la educación pública, el auto-cuidado y el bienestar y como medios de difusión de técnicas de auto-cuidado mente-cuerpo y cognitivo-conductuales de autoayuda.
11. Capacitar y educar al personal de los medios en la comunicación en formas de comunicación que informen pero que promueven paz en la población en lugar de fomentar el trauma y el estrés.
12. Ofrecer técnicas de autoayuda y grupos a estudiantes en comunicaciones y trabajadores en medios de comunicación.