La policía londinense arrestó al hombre de 50 años que provocó caos en el centro de Londres, al entrar armado a las oficinas de una empresa. La policía acordonó el lugar a 300 metros en uno de los principales corredores comerciales de la capital británica.
El hombre fue visto detenido por policías armados, luego de que ellos y un grupo antiexplosivos fueran llamados al edificio de oficinas en la calle Tottenham Court.
Scotland Yard afirmó que el edificio fue registrado, pero no hubo señales de que el hombre tuviera rehenes.
Hombre toma oficina en Londres; amenaza con volarla y toma cuatro rehenes
Policías armados y oficiales antiexplosivos han sido llamados a la calle Tottenham Court en el centro de Londres después de que un hombre entró a un edificio, de acuerdo con un testigo, y amenazó con explotar algunos recipientes con gas o gasolina que llevaba atados al cuerpo.
El diario británico The Guardian afirmó que la policía metropolitana de Londres reforzó el cordón y lo aumentó de 100 a 300 metros a dos horas de iniciado el incidente al mediodía de hoy en hora local. Los policías fueron llamados a las oficinas de la empresa Advantage HGV después de recibir reportes de un hombres que estaba arrojando computadoras, papeles y otros equipos por la ventana.
Una fuente policiaca afirmó que el hombre estaba “causando preocupación”, pero no se había confirmado que tiene retenidos a cuatro rehenes dentro del edificio. Un negociante de la policía fue llamado a la escena como una precaución.
Algunos rumores afirman que el hombre portaba recipientes químicos amarrados al cuerpo, no fueron confirmados por la policía.
Scotland Yard afirmó que el hombre había estado trasladándose la interior del edificio y en los últimos momentos se encuentra en el quinto piso. Un vocero de la policía afirmó que no han recibido reportes de disparos de arma de fuego.
El testimonio de una joven que labora en el edificio, el cual fue subido por un editor de The Huffington Post, afirma que el hombre entró al edificio con recipientes de gas o gasolina amarrados al cuerpo y amenazaba con hacerse explotar.
Abby Baafi, la directora de entrenamiento en Advantage HGV, afirmó que reconoció al hombre como un cliente de la compañía que provee cursos de operación de vehículos de transporte pesados. Se rumora que el hombre habría reprobado un curso de entrenamiento y quería de vuelta su dinero.