El Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF), contratado por la Fiscalía de Chihuahua para tratar de identificar osamentas de mujeres asesinadas en Ciudad Juárez, desmintió a través de una extensa carta los señalamientos que el pasado martes hiciera el director del Servicio Médico Forense de la entidad, Daniel Jaramillo Vela, quien acusó al grupo de expertos de haberse marchado sin haber dejado “ninguna documentación ni información sobre los peritajes” practicados en poco más de cinco años de labores.
En la carta, los peritos del EAAF, cuyo trabajo saltó a la fama internacional luego de haber identificado el cuerpo de Ernesto “Che” Guevara en Bolivia, explican que en 2005 la Procuraduría del Justicia de Chihuahua les solicitó analizar los restos óseos de 30 mujeres, los cuales finalmente se incrementaron a 83 luego de una intensa búsqueda en el Servicio Médico Forense (SEMEFO) y tras una serie de exhumaciones realizadas en fosas comunes por parte de los integrantes del equipo, quienes se dieron a la tarea de investigar en los libros de cementerios locales.
En otros casos, los restos fueron recuperados de la osteoteca perteneciente a la sala de embalsamamiento de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez, así como de las ex instalaciones abandonadas del SEMEFO en esa localidad fronteriza.
De las 83 osamentas, el EAAF sólo identificó 33 de ellas, cuyos restos fueron devueltos a sus familiares. En todos los casos, advierten, se elaboraran los dictámenes correspondientes que, en su momento, fueron entregados a las autoridades competentes en la materia.
Ya para octubre de 2010, sin embargo, los integrantes del EAAF reconocen que luego de haber agotado todas las posibles vías para identificar las 50 osamentas restantes, como el cruzar información genética y antropológica, se confirmó que ninguna correspondía a las mujeres desaparecidas que se encontraban en su base de datos, la cual incluía los casos de desapariciones y los restos de mujeres no identificados desde 1993 al 2009.
“Lamentablemente, los 50 restos femeninos restantes no habían coincidido genéticamente ni antropológicamente con ninguna de las 42 familias que quedaron sin respuesta. Y así lo informamos a las autoridades correspondientes como consta en el documento que adjuntamos”.
Aquí puedes consultar y descargar el reporte completo del Equipo Argentino de Antropología Forense: