El aspirante republicano líder en las encuestas Mitt Romney se dirige ahora a Nueva Hampshire, territorio más afín a él que Iowa, para la segunda contienda interna la semana próxima, llevando en sus alforjas una victoria por ventaja mínima en el primer estado que designa a quien deberá enfrentar al presidente Barack Obama en noviembre.
“Cargo un blanco enorme”, dijo Romney el miércoles. “Mis hombros son anchos. Estoy dispuesto a cargarlo”.
Romney obtuvo apenas ocho votos más que el exsenador por Pensilvania Rick Santorum, quien dio un salto desde el fondo de la tabla en este estado agrario del centro del país para erigirse en el competidor más fuerte del exgobernador de Massachusetts por la candidatura republicana, una contienda que se desarrollará a lo largo de seis meses en los 50 estados de la Unión.
Horas después de las asambleas, el presidente del Partido Republicano de Iowa, Matt Strawn, dijo que Romney tenía 30 mil 015 votos, contra 30 mil 007 para Santorum, quien supo granjearse el apoyo de la derecha cristiana evangélica en una población mayormente rural y 91% blanca.
El caos que ha caracterizado los primeros meses de la elección interna republicana ha desviado la atención de Obama, quien encara su reelección con la debilidad que significa el estancamiento de la economía y la persistencia del desempleo.
Antes de conocer su victoria, Romney amplió su ya enorme red de apoyo nacional al anunciar el respaldo del senador John McCain, quien ganó dos veces la primaria de Nueva Hampshire y fue el candidato republicano en 2008, derrotado por Obama.
Aunque ganó Iowa, la campaña de Romney no ha generado apoyo fervoroso en la base republicana de ese estado ni del país en su conjunto. Ese sector de la ciudadanía ha virado bruscamente a la derecha en los últimos años y desconfía de Romney debido a sus posiciones moderadas en el pasado, pero Romney es el favorito de los líderes del partido, que lo consideran el mejor dotado para vencer a Obama.
En un alarde de fuerza, Romney compró publicidad en televisión para Florida, que realiza la primaria el 31 de enero. Ha invertido 264 mil dólares para mensajes por televisión en Nueva Hampshire, 260 mil en Carolina del Sur y 609 mil en la Florida, según cifras obtenidas por The Associated Press.
Santorum, en cambio, tuvo problemas para conseguir dinero para transportes. Ha invertido apenas 16 mil dólares en un aviso de TV por cable en Nueva Hampshire.
Entre los demás aspirantes, Ron Paul fue tercero con 21.5% de los votos, seguido por Newt Gingrich, expresidente de la Cámara de Representantes, cuya posición en las encuestas ha caído, subido y vuelto a caer como en una montaña rusa. Los dos prometieron continuar la campaña en Nueva Hampshire y más allá.
Rick Perry, quien terminó en quinto lugar, dijo que regresará a Texas, estado del que es gobernador, para revaluar sus posibilidades. Ultima de lejos fue la representante por Minnesota Michelle Bachmann, cuya campaña parece haber caído en el caos.
Los resultados no son vinculantes en cuanto a la elección de delegados a la convención republicana a mediados de año, pero un análisis de la AP revela que Romney obtendría 13 delegados y Santorum 12 de no haber cambios a medida que se desarrolla la campaña. Se necesitan mil 144 delegados para ganar la candidatura en la convención republicana.
A pesar de su importancia como estado inicial, Iowa no siempre ha sabido pronosticar al ganador nacional. Obama ganó allí en 2008, pero McCain terminó en un lejano cuarto puesto.
Romney es de lejos el favorito en Nueva Hampshire, donde se sumará a la contienda Jon Huntsman, exgobernador de Utah, quien no se presentó en Iowa.
AP