Reforma publica hoy que para ganarse la simpatía de los ciudadanos y la candidatura del PRD a la senaduría por Chiapas, Blanca Lilia Calderón Escobar hace proselitismo echando mano de Dios y de la Biblia. Contrario a los propios principios del sol azteca, que marcan una separación entre Iglesia y Estado, la catedrática de la Universidad Autónoma de Chiapas le imprime a su campaña el sello cristiano para atraer el voto chiapaneco, donde 30 por ciento de la población es evangélica o cristiana y el resto católica, por lo que existe un gran apego a la Biblia.
“Con la transferencia del apoyo de Dios (Números 23;19) y el tuyo, puedo ser instrumento para promover en el Senado: salud pública, educación pública, desarrollo turístico sustentable…”, se lee en la propaganda de Calderón Escobar que se reparte en diversos municipios de Chiapas. El libro de Números habla sobre la misión de Moisés de realizar un censo sobre el pueblo, así como la aplicaciones de leyes al pueblo, mientras que el capítulo 23, versículo 19, se refiere a que Dios cumple lo que promete. “No es Dios un hombre para mentir, ni hijo de hombre para volverse atrás. ¿Acaso él dice y no hace? ¿Habla y no cumple su palabra?”, refiere el Antiguo Testamento.
Calderón Escobar tiene 47 años, es egresada de la Universidad Autónoma de Chiapas, donde también estudió una maestría en Dirección Ejecutiva de Negocios e imparte clases en el área de Administración. En 2008 se incorporó al gabinete del Gobernador de Chiapas, Juan Sabines, como directora de Promoción Comercial de la Secretaría de Economía, y desde finales de 2010, hasta hace unas semanas, estaba asignada a la Secretaría de Desarrollo Municipal de Tapachula. Dolores Padierna, secretaria general del PRD, consideró que la estrategia de Calderón Escobar no sólo viola los principios perredistas, sino la ley, pues está prohibido hacer campaña electoral con asuntos religiosos.
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