¿Militancia “fast track” en el PRI para evadir la ley?
Para evadir las disposiciones del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) y el IFE -instancias que prohíben la realización de actos de precampaña entre personas que no militan en un partido-, el PRI implementó en Boca del Río, Veracruz, un moderno sistema: afiliar “fast track” a personas que no militan en el partido.
Lo hicieron el domingo 18 de diciembre durante el arranque de las precampañas y en el marco del primer evento que Enrique Peña Nieto encabezó como candidato oficial del PRI.
El acto, fue aprovechado por la dirigencia estatal priísta para instalar 3 módulos de afiliación y credencialización entre los cientos de invitados que ese día arribaron -a bordo de decenas de autobuses-, al Word Trade Center de Boca del Río.
“Las actividades llevadas a cabo hasta ahora por Enrique Peña Nieto han sido efectuadas en reuniones de organización interna del Partido, y en lugares cerrados a los que sólo se permite el acceso de militantes del PRI”, dio a conocer la dirigencia Nacional deI Revolucionario Institucional el jueves 22 de diciembre a través de un comunicado de prensa, que en la práctica contrasta con las acciones efectuadas el domingo en Veracruz.
El pronunciamiento del PRI, se dio un día después de que los magistrados del TEPJF hicieran un llamado a los candidatos únicos, como lo es Enrique Peña Nieto, para no incurrir en actos anticipados de campaña.
“Lo que no puede(n) realizar es proselitismo abierto entre la población”, dijo el magistrado Pedro Estaban Penagos, en clara referencia a los métodos implementados por algunos partidos para evadir la ley electoral.
Los datos generales del interesado, su afiliación gremial o partidista, el cargo que tienen –en caso de tenerlo- en esos grupos y el nombre del personaje o partido político con el que se identifican, formaban parte del cuestionario de 1 cuartilla que el PRI veracruzano aplicó a todas aquellas personas que se afiliaron al partido durante el evento que encabezó el candidato Peña Nieto en ese estado.
“Si no está afiliado lo afiliamos en 2 minutos”, prometían los integrantes de un grupo de aproximadamente 10 mujeres y 5 hombres que cargaban entre sus manos los cuestionarios –del cual Animal Político obtuvo copia-, elaborados por la Coordinación de Registro Partidario de la Secretaría de Organización del PRI veracruzano.
Las filas lucían llenas desde antes de iniciar el evento. La mayoría de los interesados, gente humilde atraídos en muchos casos por la figura mediática de Peña Nieto, tenían que esperar hasta media hora para afiliarse y así ingresar, sin ninguna restricción, al evento. En otros casos sin embargo, los asistentes esperaron a que concluyera el evento para acercarse a los módulos y solicitar el registro.
“En pleno uso de mis derechos políticos, expreso mi voluntad de ser miembro del Partido Revolucionario Institucional y me comprometo a cumplir los estatutos y documentos básicos que rigen a este Instituto Político, así como su ideología”, señalaba -con letras pequeñas- la parte final del documento, con el cual los firmantes se comprometían a militar en el PRI, cuya cúpula aprovechó la popularidad de su candidato para ganar nuevos adeptos y de paso tratar de evadir las disposiciones que prohíben los actos de precampaña entre personas que no militan en el partido.
