Reforma publica que la vigilancia que provee la Policía Federal en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México es poco profunda y carente de organización, pues tras un recorrido hecho por ese diario se detectó que los federales se limitan a observar y pocas veces revisan el equipaje de usuarios y personal.
El reportero del diario se percató de que en el punto de inspección por donde ingresaron en diciembre los tres sobrecargos que fueron detenidos en España con 135 kilos de cocaína, en todo un día se registró la presencia intermitente de un agente.
Según testimonios de los propios federales, los 85 oficiales que, en promedio, están asignados por turno a cada terminal no se dan abasto para detectar ilícitos frente a las más de 150 mil personas que a diario utilizan el aeropuerto.
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