Un total de 82 personas presuntamente vinculadas a la organización delictiva de los Zetas, se encuentran bajo proceso penal por su posible vínculo con la muerte de 193 personas halladas en fosas clandestinas de San Fernando, Tamaulipas.
Al haber un balance de las investigaciones de este caso, la Procuraduría General de la República (PGR) destacó que el trabajo coordinado de las autoridades federales y militares ha permitido detener a varios de los principales responsables de estos hechos.
Entre los procesados destacan por su peligrosidad Martín Omar Estrada de la Mora conocido como “El Kilo” y Fabiola Saray Díaz Arroyo apodada “La Muñeca”, por quienes la PGR ofrecía recompensas de 15 y 10 millones de pesos, respectivamente.
También han sido asegurados líderes de distintas células de los Zetas identificados como Leonel Batres Hernández “El Gato” y Johnny Torres Andrade “La Sombra”; así como 17 policías municipales de San Fernando que daban protección al grupo.
Cabe señalar no obstante que se han identificado a otros sujetos vinculados con estos hechos y que continúan prófugos, entre ellos Salvador Alfonso Martínez Escobedo “La Ardilla”, y Román Ricardo Palomo Rincones “El Coyote”, por quienes también se ofrecen recompensas de 15 y 10 millones de pesos.
La PGR recordó que trabaja en este caso desde el pasado 2 de abril, cuando la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) atrajo la investigación por el hallazgo de los cuerpos en 47 fosas encontradas por efectivos del Ejército mexicano.
Lo anterior, en el marco de las investigaciones relacionadas con la intercepción de autobuses de pasajeros por parte de grupos delincuenciales, con el objetivo de privar de la libertad a personas que tenían como destino la ciudad de Reynosa.
Del total de cuerpos encontrados, 120 fueron trasladados al Servicio Médico Forense (Semefo) del Distrito Federal, con la finalidad de facilitar su adecuado resguardo.
Gracias a las distintas pruebas periciales y forenses realizadas al momento, se han logrado identificar 31 cuerpos, de los cuales ocho eran originarios de Guanajuato, cinco de Michoacán, tres de Querétaro, dos de Tlaxcala, dos de Guerrero, dos de Estado de México, uno de Guatemala, uno de Chiapas, uno de Tamaulipas y uno de Zacatecas.
Los otros cinco cuerpos restantes que ya fueron identificados, se encuentran aún en el proceso de entrega de sus familiares, y no se ha precisado su origen.
Notimex.