Reforma publica que la Administración de Mario Marín abrió las puertas en 2007 al sinaloense Ismael Coronel Sicairos, alias “El Judío”, quien importó desde China centenas de cabezas de búfalos de agua para engordarlas y reproducirlas a gran escala. A cambio, el gobierno poblano le proporcionó los pastizales.
Hoy, el presunto empresario duerme en un penal de Veracruz, acusado de delitos contra la salud y delincuencia organizada: se le vincula con los Beltrán Leyva.
En expedientes de la PGR consta que Alberto Jiménez Merino, Secretario de Desarrollo Rural de Marín, fue quien invitó a “El judío” a invertir en Puebla.
Leer en Reforma.