En la tercera entrega de la serie de comics animados con los que el gobierno intenta acabar con lo que llama “los mitos de la lucha por la seguridad”, la administración del presidente Felipe Calderón niega que la detención de líderes del narcotráfico incremente la violencia.
A través de su blog, acompañado por una animación, Alejandro Poiré, vocero de Seguridad, asegura que es errónea la idea de que los operativos de las fuerzas federales desaten sistemáticamente la violencia y destaca que en algunos casos la violencia disminuye posterior a la detención de algún líder de las bandas del crimen organizado.
Poiré presenta un análisis comparativo de 10 casos de criminales neutralizados de todas las organizaciones delincuenciales para echar abajo el mito del incremento en la violencia:
De acuerdo con lo dicho por el funcionario federal, de ese análisis se desprende que:
a. En dos casos –Arturo Beltrán Leyva “El Barbas” e Ignacio Coronel Villarreal “Nacho Coronel”— la tendencia creciente de los homicidios no se mantiene posterior al abatimiento.
b. En dos casos —Antonio Ezequiel Cárdenas Guillén “Tony Tormenta” y Nazario Moreno González “El Chayo”— hay un ligero incremento en la tendencia de los homicidios posterior al abatimiento.
c. En dos casos –la detención de Eduardo Arellano Félix “El Doctor” y el fallecimiento por ajuste de cuentas de Alberto Pineda Villa “El Borrado”— hay una disminución de la tendencia de homicidios posterior a la inhabilitación.
d. En un caso –Vicente Carrillo Leyva “El Ingeniero”— hay un incremento en la tendencia de los homicidios posterior a la detención.
e. En tres casos –Teodoro García Simental “El Teo”, Édgar Valdez Villarreal “La Barbie” y Flavio Méndez Santiago “El Amarillo”— no hay ningún efecto discernible de las detenciones.
Ante esos resultados, Poiré asegura que “no hay fundamento que permita asegurar de manera sistemática que las detenciones o abatimientos de liderazgos criminales detonen la violencia” porque:
1.- No hay un patrón claro que establezca la inhabilitación de un líder criminal por la acción de las Fuerzas Federales como un factor que incremente sistemáticamente los niveles de homicidios o el ritmo a los que estos crecen.
2.- Hay otros factores que no se toman en cuenta que son los auténticos detonantes de la violencia.
Poiré identifica al enfrentamiento entre las organizaciones delictivas y la debilidad de la autoridad local como otras causas de la violencia.
Redacción Animal Político