Los que apoyamos la iniciativa y el movimiento de Javier Sicilia somos los que de una forma o de otra nos sentimos agredidos, ofendidos, lastimados por esta supuesta guerra, dice el señor Ricardo Rubí Bustamante, quien fue detenido hace dos años en el operativo conocido como el ‘Michoacanazo’ y aún enfrenta secuelas físicas y psicológicas de aquella detención..
Hoy Ricardo Rubí Bustamante es subsecretario de Desarrollo Económico del Estado de Michoacán, pero además, trabaja de forma coordinada con el resto de los funcionarios detenidos en el operativo federal del 26 de mayo del 2009, con las comisiones del Senado de la República y de la Cámara de Diputados para concretar una reforma judicial que dice, proteja de verdad la presunción de inocencia.
“Se trata de que la parte acusadora demuestre su dicho y no de que el acusado tenga que demostrar que es inocente”, enfatiza.
Se trabaja en la revisión de las figura de localización y presentación de personas, en la de orden de aprensión para evitar abusos, en la del arraigo para evitar que las persona sean denigradas además de buscar los mecanismos que garanticen el derecho a una defensa adecuada, legal y al debido proceso.
Audel Méndez, presidente municipal de Coahuayana, también detenido ese 26 de mayo recordó cómo fue su detención:
“Yo llego aquí (al palacio municipal) un poquito antes de las 9 y le digo a mi director y a mi regidor de Obras Públicas que me acompañaran a una comunidad, a Zapotán para ver lo de una ampliación de red eléctrica de una callecita y un drenaje, ahí estuve con la gente y en el camino de regreso mi secretaria me habló y me dijo que me estaban esperando los militares y yo le dije que en 10 minutitos estábamos ahí, pero cuando llegamos subo llegan ellos y me dicen que los tengo que acompañar y que me estaban requiriendo, que los tenía que acompañar y yo contesté que no entendía, que qué era lo que pasaba, porque el presidente no se puede mover si no hay algún oficio para que sea formal y dicen ellos, ‘no traemos nada pero nos tiene que acompañar’, entonces le hace la seña a otro para que tome mi mano y me la hace para atrás y me la empiezan a torcer, me dijo, no se estruje ni nada porque le vamos a torcer su mano y me llevan hacia abajo a la fuerza delante de toda la gente. No sabíamos a dónde nos llevaban, yo en mi caso pues bien asustado cinco horas caminando hasta llegar a Apatzingán sin saber a dónde voy o a dónde me llevan y allá me dicen que tengo una orden de presentación”.
Al llegar hasta Apatzingan se encuentra con el resto de los edites detenidos y son trasladados hasta Zihuatanejo
“Hay un revuelo ahí de militares, de reporteras y todo, ahí sale alguien y me dice que tengo una orden de presentación y no me dan más explicaciones…inmediatamente me pasan a un helicóptero y de ahí no sabíamos a dónde íbamos cuando vimos la playa y decía Aeropuerto Internacional de Ixtapa Zihuatanejo y ahí se hizo otro movimiento también brusco, nos pasaron a un Avión grande de la Policía Federal y de ahí a la ciudad de México”.
Audel Mendez fue liberado del arraigo, regresó a encabezar la administración municipal de Coahuayana; sin embargo, contraria a la petición del gobernador de Michoacán, Leonel Godoy, y de varios detenidos, el edil no pide una disculpa pública, lo que le hace falta dice, son recursos para mejorar las condiciones de su demarcación y así es como se podrá combatir a la delincuencia organizada.
“Urge un rediseño integral del modelo policial para que se responda a la problemática real pues sin duda está fallando la procuración de justicia y la correcta aplicación de la ley”, subraya el subsecretario de la SEDECO, Ricardo Rubí Bustamante, pues los procedimientos que se siguieron en las múltiples detenciones fueron violatorias en todos los aspectos, incluyendo, agrega, la soberanía de las sedes de los poderes municipales y del mismo Palacio de Gobierno del Estado.
En México existe la presunción de inocencia pero para los funcionarios michoacanos acusados por la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) de mantener nexos con el crimen organizado, esta premisa es letra muerta, “lo digo con pleno conocimiento de causa debido a este penosos proceso que lleve y que estando en los diferentes reclusorios uno se da cuenta que ahí hay mucha gente inocente y que están ahí por ser de escasos recursos como para hacerse llegar de una buena defensa”.
Ricardo Rubí pasó más de un año recluido en el penal federal No. 4, en Nayarit y asegura ser un hombre afortunado por haber logrado demostrar su inocencia, pero lamenta que la gente que no cuenta con algún familiar de prestigio o reconocido, no sea escuchada.
“Esto no es por los Sicilia, no es por los Wallace ni por los Martí, esto es por todas las persona que sufren el flagelo de la mala procuración de justicia, de la violación de los derechos humanos que día a día padece el pueblo de México, nos sumamos todos para que las autoridades tomen el camino de la justicia y la dignidad que nos han pisoteado tanto y que no encontramos por dónde alguien pueda hacer algo.”
“La importancia del movimiento que encabeza Javier Sicilia radica en darle voz a todas las madres, esposas e hijos de todos los muertos y desaparecidos o encarcelados injustamente que no encuentran la forma de hacerse escuchar por las autoridades y que deben conformarse con que a su familiar lo llamen delincuente sin que haya una investigación que sustente el dicho”.
El señor Rubí Bustamante cuestiona duramente el actuar de la autoridades mexicanas frente a la eficiencia de éstas, ante el asesinato de funcionarios norteamericanos o el hijo del poeta Javier Sicilia, contrastando con la ineptitud de las mismas instituciones ante los miles de casos que ni siquiera han salido a la luz.
“Yo le decía a Javier Sicilia que al fin de cuentas, lo que nos pasó a nosotros (a los involucrados en el llamado michoacanazo) no fue tan grave, pues después de 350 días ya puedo protestar, pero su hijo no lo va a poder hacer, y así lo vemos con los ejecutados de Tepic, de Michoacán, de Juárez, en Nuevo León…”.
Si bien el estado de Michoacán es referente de violencia, Ricardo Rubí destaca el papel de la ciudadanía al no dejar morir la ciudad Morelia, una ciudad colonial que no ha visto empañada su actividad turística como otros lugares de la misma vocación como Cuernavaca, Morelia después de los ataques del 15 de septiembre del 2008 se levantó y sigue de pie pese a las noticias de violencia que se registran en los medios de comunicación.
“Todo lo que dicen de Michoacán en los medios es inventado”, acusa y al mismo tiempo apela a la responsabilidad y a la ética de los comunicadores que, por lo menos en su caso y en el de sus más de 30 compañeros, faltaron por completo a los principios básicos del periodismo, es decir a la investigación.
“Cuando yo estuve encerrado, algo que me lastimaba mucho era todo lo que lo medios habían dicho de mi persona sin sustento alguno y entonces reclamaba el periodismo de investigación, con un estudiante de periodismo que haya investigado, se hubiera dado cuenta que todo era falso”
Entre algunas irregularidades que refiere el señor Ricardo Rubí se encuentra el caso del ingeniero Israel Tentory, al momento de ser detenido se desempeñaba como jefe de asesores de la SEDAGRO en Michoacán, “se lo llevaron porque siendo presidente municipal de la La Huacana apoyó al crimen organizado y con el dinero que recibió de la delincuencia organizada puso dos gasolineras, una en Carácuaro y Nocupétaro; en primer lugar, nunca fue presidente de La Huacana y en Carácuaro ni hay gasolinera”.
“El movimiento por la paz, es otra muestra de que el pueblo está despertando y se está dando cuenta de que las autoridades pretenden mentirle, todo empezó con el teatro al que hoy le llamamos el ‘michoacanazo’”.
El proceso que vivió lo convirtió en otra persona, asegura pues paradójicamente fue una experiencia enriquecedora aunque sin duda la más dura, pues él, como el resto de los detenidos, tiene secuelas físicas que lo han llevado de médico en médico y de cirugía en cirugía. “No me siento bien…, no me siento bien pero vamos a salir adelante”.
La desconfianza absoluta en las instituciones procuradoras de justicia lleva a Ricardo Rubí Bustamante, incluso, a aconsejar a Julio Cesar Godoy Toscano, quien se encuentra en calidad de prófugo de la justicia, a no entregarse a las autoridades salvo, se le garantice un proceso justo y digno.
“Si a mí Julio Cesar Godoy me lo preguntara, en lo personal le diría que no se entregara porque va a pasar las vejaciones que yo pasé los ocho meses que estuve detenido por la autoridad federal; si yo supiera que la reclusión es con todas las de la ley, con todos los derechos humanos en la mano, que se presente pero actualmente como actúan en esos centro de readaptación federal no le deseo ni a mi peor enemigo que caiga en esos lugares. Yo en estos momentos le diría: no te entregues porque vas a pasar por tortura física y psicológica impresionante”.