Andrés Manuel López Obrador y Marcelo Ebrard reiteraron su compromiso de que el candidato presidencial en 2012 será el mejor posicionado y manifestaron su aval a la realización de dos debates y la consulta a la ciudadanía, a través de encuestas, para definir al abanderado.
“Yo creo que será imposible no respetar, sea por él, por mí, sea cual sea el resultado de la encuesta y nos vamos a alinear a eso”, dijo el jefe de Gobierno del Distrito Federal.
A su vez, López Obrador dejó en claro que las encuestas que se realicen deben garantizar certeza de que reflejarán el sentir de la gente y no habrá injerencias externas, porque de lo contrario, “me van a dar una paliza”.
El tabasqueño se pronunció por hasta tres “buenas encuestas que no estén cuchareadas y que reflejen el sentir del pueblo”, y dejó en claro que, pese a lo que sus detractores opinan, aceptará los resultados que definan la candidatura presidencial de las izquierdas.
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