El ministro de Asuntos Exteriores de Yemen, Abubakr al-Qirbi, sugirió hoy que hay muchas probabilidades de alcanzar un acuerdo político sobre una transición pacífica de poderes en ese país árabe.
En declaraciones a la prensa en Saná, la capital yemeni, el canciller dio a entender que la salida del mandatario Alí Adbullah Saleh no sería un obstáculo para llegar a un acuerdo que podría anunciarse este mismo sábado.
Saleh ha cedido a la presión de las protestas y ha prometido dejar el poder a fin de año, pero el movimiento a favor de reformas democráticas ha pedido su inmediata dimisión.
“Creo que el período para su salida es algo que se puede negociar. No debería ser un obstáculo para llegar a un acuerdo”, añadió el canciller.
Al Qirbi, quien ostenta el cargo en forma interina, explicó que nada más al ratificarse el pacto comenzarán las negociaciones con objeto de definir un calendario para que el presidente entregue el poder.
Las declaraciones del al-Qirbi se producen 24 horas después de que el presidente Saleh, quien ha permanecido más tres décadas en la Presidencia, aseguró que está preparado para dejar el poder, pero sólo si logra transferirlo a “manos seguras”.
Dirigiéndose a sus “hijos los jóvenes manifestantes”, Saleh indicó que está “dispuesto al diálogo” con ellos y a “recibir sus demandas”, reportó la agencia estatal de noticias yemení SABA.
Desde que empezaron las protestas, a finales de enero, Saleh ha tratado de salvar su presidencia renunciando a volver a ser candidato cuando concluya su mandato en 2013, ofreciendo una nueva Constitución e incluso adelantando las elecciones a enero de 2012.
Cientos de miles de personas salieron ayer a las calles de la capital yemení para insistir en la salida del mandatario en una jornada que no estuvo exenta de violencia y que fue denominada por la oposición como “El Día de de la Partida”.
El viernes 18, durante la jornada de protestas, al menos 52 personas murieron por disparos de los francotiradores y de las fuerzas de seguridad, según denunciaron organizaciones de Derechos Humanos como Amnistía Internacional.
En respuesta a esta matanza, un buen número de altos mandos militares, dirigentes tribales, representantes diplomáticos y parlamentarios progubernamentales se han declarado en rebeldía o han renunciado a sus puestos.
Notimex*